Salamanca estudia la herencia cultural de Marx, junto a otros cursos universitarios

La primera semana de los Cursos Internacionales de la universidad de Salamanca ha convocado a más de trescientos profesores como alumnos de los tres cursos que definen la nueva orientación de la universidad de Salamanca: La Segunda República, 100 años después de Marx y Relaciones laborales en la crisis económica. Junto a éstos se celebran en el mes de julio otros dedicados a Filología Superior, que en la semana pasada han tratado La generación poética de los años 50-60 y Música para órgano.

Salamanca reúne en el mes de julio a 1.500 estudiantes de sus cursos universitarios, ya que también se han iniciado los de Lengua y Cultura española para extranjeros.La vigésima edición de los Cursos Internacionales atrajo además en su inauguración a las autoridades políticas, regionales y nacionales que acompañaron al vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra. Éste acudió a inaugurar el curso de Cien años después de Marx, organizado con la colaboración del CECAL (sección de la Fundación Pablo Iglesias para Castilla y León).

La intención de los organizadores de este curso, dirigido por el profesor Quintanilla, es destacar la importancia de que en el seno de una universidad varios especialistas en diversas materias puedan tratar la herencia marxiana con una perspectiva académica, y esto poder realizarlo en un ambiente normal, sin dramatismos. Guerra, sin embargo, destacó en su intervención en la primera sesión del curso que, si esto era cierto, no era menos extraordinario que el vicepresidente de un gobierno socialista inaugurara en una universidad un curso sobre Marx.

En este curso, que ha reunido entre otros a Jacobo Muñoz, Giulio Giorello, Pep Subirós, Ludolfo Paramio, Pedro Rivas, Ramón Vargas Machuca, Manuel Atienza, se han estudiado desde distintas perspectivas la doctrina y herencia cultural de Marx. En las intervenciones de los ponentes ha sobresalido, según el director del curso, que se valora más que el marxismo la obra de Marx, y se acepta que Marx es un clásico con vigencia restringida y que existen grandes tesis marxistas hoy inaceptables.

En esencia se ha producido un revisionismo que sostiene una tesis básica de que la revolución en la sociedad desarrollada es imposible y que las reformas introducidas por el Estado confluyen en el ideal moral del socialismo marxista. Incluso se ha dicho que el marxismo es la deformación dogmática del pensamiento de Marx.

Revisar posiciones

María Dolores Gómez Molleda pretendía, al organizar el curso de la Segunda República española, revisar distintas posiciones, temas y metodología aplicada al estudio de esta época de la historia de España. Se ha adoptado una postura crítica, una revisión del trabajo realizado hasta ahora, que ha adolecido en la proximidad de los acontecimientos y de lejanía de entidad historiográfica. Así, entre algunos ponentes que han participado en el curso, Malefakis ha preferido realizar una exposición sobre la sociedad española de los años treinta, Víctor Alba ha hablado de las fuerzas obreras desde su propia experiencia personal y Salas Larrazábal se ha referido a la industria armamentística.La República, en el curso, ya no se ha analizado en función o formando parte de lo que se considera su consecuencia, la guerra civil.

En el último de los cursos, Las Relaciones laborales en la crisis económica, predominaron los temas actuales de la jurisprudencia laboral. Según el director del curso, Carlos Manuel Palomeque, el resultado del trabajo es que se ha reconocido la eficacia directa de las medidas de contratación temporal, de concertación y otras que sirven para flexibilizar y racionalizar el campo del trabajo. Aunque estas medidas influyan, sin embargo no son el instrumento para acabar con la crisis económica.