Los estatutos de los teatros nacionales garantizan la plena autonomía artística

Los teatros nacionales disponen de unos estatutos con objeto de "estructurar y racionalizar" su funcionamiento, que significan "una miniconstitución", con absoluta responsabilidad por parte de los directores y evita el dirigismo cultural, según comentó ayer José Manuel Garrido, director general de Música y Teatro, del Ministerio de Cultura, en la presentación de los estatutos del Ballet Nacional de España y los teatros nacionales de la Zarzuela y María Guerrero.

Los estatutos de las unidades de producción del organismo autónomo Teatros Nacionales y Festivales de España, de inmediata publicación en el Boletín Oficial del Estado, se presentarán en una orden ministerial con tres anexos. Para el director general de Música y Teatro, José Manuel Garrido, se trata de una legislación avanzada y homologada con otros modelos extranjeros, que va a permitir una mayor autonomía artística y funcional, tanto en los planteamientos de programación como en la distribución de los presupuestos.Los directores de los teatros nacionales tendrán absoluta responsabilidad en su gestión. Los estatutos van a ser estrenados por María de Ávila, directora del Ballet Nacional de España; José Luis Alonso y Benito Lauret, directores del teatro nacional de la Zarzuela, y Lluís Pasqual, director del teatro nacional María Guerrero, quienes en estos momentos perfilan la programación de la próxima temporada.

En el proyecto de orden ministerial se señala que es aconsejable "para el óptimo desarrollo de las actividades teatrales, líricas y musicales y coreográficas, proceder a la máxima descentralización y autonomía artística", junto con la creación de las unidades de producción teatral, lírica y coreográfica. En el primer artículo de los tres estatutos se especifica que los centros tendrán "plena autonomía artística y de creación".

En la elaboración de estos estatutos, según declaró José Manuel Garrido, han colaborado los actuales directores de los centros nacionales, miembros de la Administración y profesionales que estuvieron vinculados a dichos centros, con especial mención de Adolfo Marsillach, quien fue el primero en exigir un estatuto cuando dirigía el Centro Dramático Nacional.

Estos estatutos "de mínimos" tendrán un desarrollo posterior con reglamentos internos. Uno de los aspectos prioritarios será la creación de las propias compañías, fijadas en los estatutos, pero de difícil formación "con la legislación laboral española", según reconoció ayer el director general de Musica y Teatro. Otra fuente de conflicto será las incompatibilidades de los directores con otros trabajos de empresa privada. De hecho, Lluís Pasqual puso como condición poder realizar un montaje anual con el Teatre Lliure, de Barcelona.

Estructura de dirección

El Ballet Nacional de España tendrá un director, que asumirá la dirección de la compañía, con dos adjuntos, para danza clásica y danza y folklore españoles; un intendente y un jefe de producción. El director del ballet, contratado por periodos de dos años, propondrá el contenido de la programación de actividades, incluyendo posibles coproducciones y giras; proponer contrataciones del personal artístico y técnico y la composición de la compañía. Un consejo de dirección se encargará de planificar y organizar las temporadas del ballet y evaluar las actividades desarrolladas. Los restantes artículos especifican las misiones de los adjuntos a la dirección, del intendente, el jefe de producción, el régimen disciplinario del personal artístico y la aprobación del presupuesto.El teatro nacional de la Zarzuela tendrá un director del teatro, que asumirá la dirección musical y de la compañía lírica, un director artístico, un intendente, un jefe de producción y un consejo asesor. El teatro nacional María Guerrero contará con un director del teatro, que asumirá la dirección de la compañía, un jefe de producción, un gerente, un director de sala, un comité de lectura y un consejo asesor.