Polémica entre la Junta y los ganaderos sobre la situación de la epidemia de glosopeda

La Consejería de Agricultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha hecho público un informe sobre la situación actual de la epizootia de fiebre aftosa o glosopeda en cuatro provincias de la región, con el que se intenta tranquilizar a los ganaderos asegurando que se dispone de, todas las dosis de vacuna necesarias. Sin embargo, tanto ganaderos como veterinarios opinan que la vacuna se distribuye "con cuentagotas", sólo se facilita a poblaciones comprendidas en las zonas donde se haya detectado algún brote y en menor número del pedido.Se ha dado además el caso de ganaderías en las que han aumentado las bajas en las reses tratadas con las primeras vacunas repartidas, las que tenía la Jefatura de Producción Animal, fabricadas por dos laboratorios españoles. No ha ocurrido lo mismo con las dosis procedentes de laboratorios franceses y alemanes. Presumiblemente, la inactividad de la vacuna española es debida más a condiciones de almacenamiento o transporte que a su composición, ya que aunque están vigentes en cuanto a caducidad, su conservación en la mayoría de casos no es la adecuada.

Los focos detectados en la región ascienden a 108, de los que 96 corresponden a la provincia de Toledo, que cuenta con un número de animales afectados de 21.000 de los 26.000 que hay en Castilla-La Mancha, y más de 750.000 sospechosos de infección, también en Toledo, frente a los 768.000 totales. Las bajas producidas han sido 4.700 en Toledo, 300 en Ciudad Real, 100 en Albacete y 50 en Cuenca.

El primer brote fue detectado en Belvís de la Jara (Toledo) el día 15 de febrero, y a partir de entonces se cerró el mercado nacional de ganados de Talavera de la Reina, uno de los más importantes del país, que se celebra cada quince días y que produce unas transacciones comerciales quincenales que ascienden de 100 a 150 millones de pesetas.

Se estima que de persistir el actual tiempo lluvioso o húmedo la epidemia podría remitir en breve, siempre y cuando se dispusiera de los medios de policía sanitaria necesarios para atajarla con las debidas garantías de éxito.