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Las Malvinas, capítulo destacado en el presupuesto militar británico

Soledad Gallego-Díaz

El Gobierno conservador británico dedicará este año 624 millones de libras esterlinas (125.000 millones de pesetas) para la defensa de las islas Malvinas (Falklands), según datos oficiales hechos públicos en Londres. El presupuesto total del Ministerio de Defensa será de 15.900 millones de libras, 1.500 millones más que el año pasado. Los gastos militares representan la partida más importante del presupuesto nacional, excepción hecha de la Seguridad Social.Los planes presupuestarios del Gobierno de Margaret Thatcher (en el Reino Unido el año fiscal va de marzo a marzo) prevén otro aumento de los fondos dedicados a las Malvinas en 1984-1985 (684 millones de libras) y una disminución en 1985-1986 (522 millones). El gasto más elevado lo representa el mantenimiento de la fuerte guarnición que Thatcher quiere conservar en las islas y que puede superar los 4.000 hombres actualmente destinados allí. La infraestructura de esta guarnición, que comprende también seis fragatas, escuadrillas de Harrier y Phantom y al menos un submarino atómico, costará este año 424 millones de libras. Los otros doscientos millones se emplearán, en la compra de equipo.

Aunque resulta difícil calcular el coste exacto, no ya de la guerra de las Malvinas en sí, sino de las consecuencias que dicha guerra tiene en la economía británica, algunos expertos señalan que para marzo de 1986 el Reino Unido habrá gastado 2.520 millones de libras en defender las islas australes, y ello sin contar el coste del material de guerra que se perdió en el campo de batalla y que debe ser reemplazado: mil millones de libras.

Innegociable

Pese a todo, el Gobierno de Thatcher está dispuesto a mantener su política de firmeza respecto a Argentina, sin aceptar ningún tipo de negociaciones. La oposición laborista y socialdemócrata considera, por el contrario, que la falta de voluntad negociadora perjudica los intereses británicos y obliga a realizar un gasto desproporcionado en unos momentos en los que el Gobierno lleva a cabo una política de austeridad en el gasto público y en los que existen más de tres millones de parados, sin que pueda preverse una reactivación del mercado de trabajo.

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Al margen de los gastos ocasionados por las islas Malvinas, el Gobierno conservador ha aprobado y anunciado aumentos sucesivos del presupuesto general del Ministerio de Defensa, a fin de respetar el compromiso contraído con la Alianza Atlántica.

La OTAN pide a todos sus miembros que incrementen los gastos militares en un 3% real anual, es decir, por encima del índice de inflación, pero, salvó Estados Unidos y el Reino Unido, ninguno de los grandes ha podido poner en práctica este acuerdo.

Según los datos oficiales, el presupuesto de Defensa será en el año fiscal 1983-1984 de 15.900 millones de libras (un 10,9% más que en 1982-1983), para pasar a 17.300 millones en 1984-1985 y a 18.300, en 1985-1986. Ningún otro ministerio alcanza estas cifras e incluso la Seguridad Social, con un presupuesto de 34.300 millones de libras, se ha visto incrementada sólo en un 5,9%.

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