Muestra de los recuerdos de Juan Guerrero, 'cónsul general de la poesia'

Juan Guerrero Ruiz y sus amigos es el título de la exposición que se inaugura hoy en la Fundación Valdecilla (calle de Noviciado 3, de Madrid) con el fin de dar a conocer las relaciones personales con los principales protagonistas de la cultura española de la primera mitad de este siglo de quien fue calificado por Juan Ramón Jiménez como "cónsul general de la poesía". La muestra, organizada por el aula de Artes Plásticas de la Universidad Complutense, permanecerá abierta hasta el día 28 de este mes.

Juan Guerrero Ruiz (Murcia, 1893-Madrid, 1955) fue uno de los testigos directos más destacados de la producción literaria y pictórica surgida en torno a la generación del 27. Como ha explicado el crítico Juan Manuel Bonet, comisario de esta exposición, "a lo largo de más de cincuenta años de vida literaria, simultaneada con una carrera administrativa, este hombre minucioso fue, sucesivamente, secretario de la revista Indice (y virtual secretario de Juan Ramón), director del suplemento literario de La Verdad, director de la revista Verso y Prosa, secretario de la Revista Hispánica Moderna, de Onís, y director de la Editorial Hispánica.

Testimonios selectos

Fruto de la relación fecunda, tanto literaria como en el terreno de la amistad, de Juan Guerrero Ruiz con el mundo cultural de su época -fue amigo, protector, confidente, colaborador de poetas y pintores- es esta muestra, en la que se exhiben 309 testimonios de la creación literaria y pictórica más selecta de entonces.Los nombres de escritores como Corpus Barga, Antonio Machado, José Bergamín, Pedro Salinas, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Carmen Conde, Miguel Hernández, Gabriel Miró y Miguel de Unamuno, o pinturas y grabados de Daniel Vázquez Díaz, Gregorio Prieto, Ramón Gaya, Salvador Dalí y Juan Bonafé, han ido formando la colección que ahora se presenta como representativa de una de las épocas más fecundas para la literatura española contemporánea.

En el catálogo Juan Guerrero Ruiz y sus amigos, en el que se recopilan artículos de Melchor Fernández Almagro, Francisco Javier Díez de Revenga, Enrique Azcoaga o Ramón Gaya, aparece también el de Luis Garay escrito en 1948 y en el que describía las tres épocas de Juan Guerrero Ruiz.

En la primera, fechada de 1915 a 1920, aparece Guerrero Ruiz junto al poeta Andrés Sobejano y José Ballester. Hasta 1930 definiría la segunda época, en la que le muestra con los pintores Gaya, Flores, Garay, Fuensanta y Bonafé. De paréntesis califica la década de los treinta, en la que ya aparece en Madrid, al lado de Miguel de Unamuno y los poetas Miguel Hernández y Luis Cernuda. Después del 40, con la que cierra el ciclo Luis Garay, se refiere más a su devoción por el poeta de Moguer, Juan Ramón Jiménez.

Siempre Juan Ramón Jiménez

Y es precisamente esa devoción por el poeta de Moguer la que inicia la larga serie de recuerdos y testimonios de la exposición. Así, se muestra un cuaderno escolar, de 37 páginas, conteniendo manuscritos y dibujos de Juan Ramón o una instantánea suya en el Retiro hecha por Guerrero Ruiz. Estas muestras pueden ampliarse con la lectura del telegrama "Fue imposible el viaje. Le estoy agradecido por todo. Cuiden mucho a Santa Berta Singerman y no la dejen recitar versos malos. Metan en la cárcel a Stoleck. Abrazos. Juan Ramón". Berta Singerman, la célebre recitadora, aparece citada en Juan Ramón, de viva voz.Otro apartado de la exposición habla de los primeros pasos murcianos, y en él diversos ejemplares de escritores y poetas dedicados al "delicado poeta de la prosa", como le califica Isidoro Solís. Del suplemento de 'La Verdad' a 'Verso y Prosa' aparece la reproducción de un paisaje de Gregorio Prieto, entre otros recuerdos.

Importante es la recopilación en el apartado En la amistad de los pintores. Hay retratos de Juan Guerrero Ruiz realizados por Joaquín (Joaquín García Fernández) y Pedro Flores, así como una cabeza de José Planes y un álbum de retratos realizados por José Garay. De este último pintor se muestra el único retrato realizado a An Puig, esposa de Carlos Ruiz-Funes, del que también se muestra el suyo. De Ramón Gaya conservó varias acuarelas en las que aparecen amigos comunes.