El Pacto de Varsovia sugiere a la OTAN la negociación de un tratado de no agresión entre los dos bloques militares

Los máximos dirigentes de los siete países miembros del Pacto de Varsovia concluyeron ayer en Praga la reunión del Comité Político Consultivo con la firma de un documento final en el que proponen a los Estados miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) la negociación de un acuerdo "sobre el no empleo de la fuerza militar y la salvaguardia de las relaciones de paz". Este proyecto de la URSS y sus aliados sirve para formalizar la oferta de negociación formulada por el líder soviético, Yuri Andropov, el pasado 21 de diciembre en Moscú.

La propuesta es una versión mejorada de las ya emitidas por el mismo órgano del Pacto en Moscú, en 1958, y en Varsovia, en 1965.El proyecto, adoptado por unanimidad, está fundamentalmente dirigido a los países de la Alianza Atlántica, pero a él podrían sumarse también, según informó la agencia checoslovaca CTK, "todos los demás Estados".

Checoslovaquia, como país anfitrión, ha sido encargada de la divulgación de esta declaración política como documento oficial de las Naciones Unidas y de informar a todos los Estados, participantes en la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa.

La cumbre de los siete Estados socialistas -Bulgaria, Hungría, Polonia, República Democrática Alemana, Rumanía, Checoslovaquia y Unión Soviética- encargó a los ministros de Asuntos Exteriores del Pacto de Varsovia, que debe reunirse en fecha aún no precisada, estudiar "los pasos concretos para la realización de esta iniciativa".

La sesión de ayer, segunda y última de la cumbre, duró apenas hora y media y estuvo presidida por el secretario general del Partido Comunista de la URSS, Yuri Andropov. Los jefes de Estado y de partidos comunistas del bloque socialista escucharon un informe del comandante supremo de las fuerzas del Pacto de Varsovia, el mariscal soviético Viktor Kulikov.

Situación en Europa

El comunicado final de la reunión precisa que ha sido examinada "la situación en Europa e complicado contexto internacional actual y algunas otras cuestiones internacionales". También "se ha pasado revista a las orientaciones más importantes en la lucha para detener el peligro de guerra nuclear, la salvaguardia y el reforzamiento de la distensión y de la seguridad y el desarrollo de la cooperación en Europa".

El texto difundido por la agencia checoslovaca añadió que la reunión, que se ha prolongado durante dos días, se celebró en "un ambiente de amistad y de comprensión mutua entre camaradas", y confirmó "la unidad de opinión de los Estados miembros sobre las cuestiones de principio de la política europea y mundial". La próxima reunión del Comité Político Consultivo del Pacto de Varsovia tendrá lugar en Sofía en fecha no determinada.

El órgano del PCUS, Pravda, afirmaba ayer, en una correspondencia desde Praga, que "es necesaria la paz para poner en marcha los planes para la construcción de una nueva sociedad".

El ministro de Asuntos Exteriores de Checoslovaquia manifestó ayer, en una entrevista concedida a un diario soviético, que "la misión principal" de la reunión de Praga "es prevenir el peligro de una guerra nuclear e impedir la carrera de armamentos", aunque advirtió que los países del Pacto de Varsovia están "dispuestos a responder a cualquier agresor y a defender las conquistas revolucionarias del socialismo".

Rude Pravo, órgano del Partido Comunista de Checoslovaquia, afirma que los Estados miembros del Pacto de Varsovia ofrecen Ia mano tendida para cooperar con todos los que lo deseen efectivamente", y están dispuestos a "disolver su alianza de defensa si su propuesta de desarme encuentra ecos favorables en los países de la OTAN".

Albania, por su parte, calificó la cumbre de "reunión belicista que quiere incrementar la carrera armamentista", y condenó a la Unión Soviética por querer imponer a sus aliados un aumento de su contribución a la consolidación del Pacto de Varsovia.