Secuestro temporal de seis personas por "razones ecologistas"
El propietario de una fábrica de harinas, ubicada en las proximidades de la vizcaína de Ispáster, fue retenido en la tarde del viernes junto con cinco empleados de la empresa. Los autores del hecho, que alegaron motivaciones ecologistas, dejaron además dos bombas en la factoría. Al liberar a los rehenes, tras un largo recorrido los secuestradores dijeron: "Esto es un aviso".
Cuando el transportista autónomo Miguel Vallejo Pascual se encontraba en su furgoneta, a la espera de ser contratado, dos jóvenes se le acercaron para pedirle que les condujera a unos pabellones industriales de la capital. En la mitad del recorrido le ordenaron que se apeara, mientras le intimidaban con una pistola. Después de pasarle a la parte trasera del automóvil, donde le colocaron unas gafas oscuras y le ataron de pies y manos, iniciaron un largo recorrido. Al cabo de hora y media los secuestradores pararon junto a otro vehículo del que cargaron dos bolsas, a la vez que subían a la furgoneta otras dos personas, al parecer también armadas. Poco más tarde subieron cinco personas más, atadas de pies y manos.
Los seis secuestrados fueron liberados posteriormente en la localidad vizcaína de Gorozika, y el comando armado se llevó la furgoneta. Las víctimas se presentaron entre sí al terminar la odisea. Al parecer, la mencionada empresa de harina de pescado sufre indicios de contaminación.
