Una victoria de la democracia
No es necesario ser español para celebrar las noticias que llegan de Madrid. (...)Una terrible guerra civil y tres décadas de autocracia de Franco ensombrecerían el renacimiento de la democracia española. Antes de la muerte del general Franco en 1975, en España no había elecciones, partidos de oposición ni Prensa libre. Una de las herencias del régimen franquista era la creencia de que solamente la derecha tenía el derecho de gobemar. Así pues, el triunfo de González no tiene el significado que podría tener en otros países. Simboliza la liberación de la nueva España de los lazos que la ataban a la vieja.
Si España ha iniciado este nuevo camino es porque el oven González ayudó a abrirlo. Su socialismo lo debe más a Wil Brandt que a El Capital de Marx. La etiqueta marxista la abandonó en 1979, y su partido, con mucho tacto, dio prioridad a la defensa de la democracia. (...)
Al prometer cambios, el partido se verá obligado a hacer algo para resolver un paro con un índice del 22%, un 12% de inflación y una creciente deuda exterior. (...)
La vieja España tiene sus fanáticos partidarios, suficientes como para dar un segundo lugar a Alianza Popular, dirigida por Fraga Ir¡barne, un ex ministro de Franco. Pero ni Fraga ni sus amigos militares podrán invocar el peligro rojo de Moscú. España se ha salvado de los rojos por los electores: los comunistas lograron sólo cinco diputados en un Parlamento de 350. (...) Procediendo de la izquierda, Felipe González es ahora un político de centro. Debe saber que la victoria socialista es una consecuencia de sus predecesores de centro-derecha, que respetaron las reglas de la democracia, y porque un joven y popular monarca frustró las conspiraciones militares. Todo ello hace posible que el nuevo Gobiemo, el primero que cuenta con una mayoría absoluta, obre con prucfencia razonable. De esta forma, la liberación de España será una realidad.
31 de octubre
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