La Brigada Antigolpe posee amplia información sobre la trama civil involucionista

La Brigada Antigolpe, que depende directamente del director de la Seguridad del Estado, Francisco Laína, ha recibido de los servicios de información de la Policía numerosa documentación sobre varios civiles de ideología ultraderechista, afincados en Madrid, que podrían estar implicados en la trama golpista descubierta el pasado fin de semana. Este grupo que dirige, Emilio Sánchez, un hombre del ex comisario Roberto Conesa, no ha conseguido resultados positivos desde que la brigada fuera creada tras la rebelión del 23-F.

Los servicios de información de la Policía que venían vigilando a numerosos miembros de la extrema derecha en Madrid decidieron enviar, tras descubrirse la conspiración involucionista preparada para el 27 de octubre, víspera de las elecciones legislativas, los datos necesarios a la Brigada Antigolpe para que investigue las posibles conexiones civiles con los militares golpistas. Desde que fuera creada tras los lamentables sucesos del 23 de febrero de 1981, la Brigada Antigolpe no ha conseguido el fin que perseguía: desarticular la trama civil que se esconde tras el 23-F e interceptar cualquier intento involucionista. A pesar de contar con abundantes medios humanos y técnicos , la también denominada brigada del amanecer no ha conseguido más. que reventar operaciones como la del 23 junio, en la que se detuvo a cuatro militares y a varios civiles por supuesta conspiración armada para la víspera de la onomástica del Rey, pero los hombres de Emilio Sánchez no consiguieron pruebas para procesar a ninguno de los detenidos. Emilio Sánchez reclutó para esta brigada a la práctica totalidad del grupo anti-GRAPO que dirigía el inspector Juan Antonio González Pacheco, más conocido como Billy el Niño, antes de ser apartado por el comisario Manuel Ballesteros de las unidades antiterroristas. Emilio Sánchez, hombre de confianza de Francisco Laína, sorprendió al ministro del Interior, Juan José Rosón, cuando le presentó la lista de las personas que había elegido para llevar la brigada y hasta el momento su labor ha sido duramente criticada, incluso en altos medios policiales consultados por este periódico. Por lo que se refiere a la última intentona golpista preparada para la víspera de las elecciones legislativas, la Brigada Antigolpe no detectó en ningún momento el movimiento involucionista ni intervino en la operación que dió con los presuntos conspiradores.Página 19