_
_
_
_

Apertura de la Bienal de Venecia, con un fuerte contenido conservador en las muestras artísticas

Espacios especiales para las obras de Antoni Tàpies y Antonio López García

La 40ª edición de la Bienal de Venecia fue inaugurada oficialmente por el presidente de la República, Sandro Pertini, en la mañana del pasado domingo. Entre dos espectaculares trombas de agua, la tónica meteorológica de Venecia en estos primeros días de junio, el presidente italiano llegó a los Giardini di Castello, tradicional sede de la Bienal, y recorrió la exposición Arte como arte: la persisteza dell? opera, situada en el pabellón central, que contenía tres muestras monográficas sobre Matisse, Brancusi y Schiels, además de una selección antológica de artistas europeos y americanos, así como la correspondiente a Italia.

En el pabellón de España se exhiben obras de Guinovart, Torres, Abad, Cruz de Castro y Chicano, y en otros espacios cuadros de Antonio López García y una retrospectiva de Antoni Tàpies En la misma ciudad, seis países, entre ellos España, han decidido crear una asociación cultural latina.A la entrada de la Bienal, esperaban al presidente las autoridades y una multitud, entre los que se encontraban un nutrido grupo de manifestantes que protestaban contra la actual organización. No se produjo, sin embargo, ningún altercado destacable y el presidente Pertini atravesó sonriente la barrera de manifestantes. En el acto de apertura, el presidente del ente autónomo de la Bienal, Guiseppe Galasso, justificó el carácter conservador de la actual edición como reflejo de la situación general que atraviesa el arte en la actualidad, más preocupado por la maestría que por el furor vanguardista. En este sentido, desde luego no hay duda que la Bienal recién inaugurada no pasará a la historia por su carácter revolucionario.

En los Giardini di Castello, además de las citadas exposiciones del pabellón central, en una de las cuales estaba representado con tres obras el artista español Antonio López García, abrieron también sus pabellones los 37 países asistentes este año. El de España, cuyo comisario fue Luis González Robles, presenta la obra de cinco artistas: Guinovart, Rosa Torres, Cruz de Castro, José Abad y Eugenio Chicano.

Pero con el millar largo de obras expuestas en los respectivos pabellones nacionales no se acaban las actividades de la Bienal, ni tampoco de la ciudad de Venecia, que ofrece un variado repertorio de actos culturales para la incontable masa turística que la visita en esta época veraniega. Así, dentro de lo organizado específicamente por la Bienal, hay que contar también las amplias retrospectivas individuales sobre Tápies, que exponía mas de medio centenar de obras en el bello marco de la Scuola Grande di San Giovanni Evangelista, y otra menor sobre Riccardo Tommasi Ferroni, cuya inauguración se retrasó al no querer enseñar su

trabajo el artista italiano en el lugar donde inicialmente estaba previsto. Por otra parte, el arte joven estuvo representado en dos muestras, reunidas con el título de Aperto 82, que pueden visitarse en los Cantieri Navale della Giudeca y los Magazzini del Sale alle Zattere.

El resto de la cualificada oferta artística corre a cargo de la ciudad y consiste en las siguientes exposiciones monográficas: Renato Gutuso, Restauración de la gran vidriera de San Giovanni y Paolo, Plantas y vistas de Venecia, El rugido del león -una divertida selección de estampas satíricas de la historia contemporánea de Venecia-, etcétera. A todo lo cual hay que añadir además la posibilidad de contemplar las maravillosas colecciones artísticas de los museos públicos y privados que posee la ciudad.

No recobra el prestigio

Con todo, a pesar de este espectacular escaparate de arte, que ha sido y es Venecia, la verdad es que la Bienal, respecto al arte actual, no consigue recobrar el prestigio que gozó de manera indiscutible hasta la crisis de finales de los sesenta. Desde entonces, se puede decir simplemente que sobrevive sin excesiva pena ni gloria. No ha repercutido esta crisis, sin embargo, en la masa de visitantes: con más o menos interés, nadie se resiste a acudir a Venecia.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_