La ausencia española

Tras la ausencia del cine español en el último festival de Berlín, donde la anunciada película de Carlos Saura Dulces horas, fue retirada por decisión del coproductor francés, otra inasistencia de nuestra cinematografía se producirá en el festival de Cannes que hoy comienza.La Dirección General de Cinematografía no hace públicos, lógicamente, los títulos rechazados por el comité del festival francés; hasta tres, al parecer, se presentaron oficialmente a la consideración de Cannes sin que ninguno ofreciera, a su criterio, la calidad exigida por el festival.

Sin embargo, a juicio de numerosos productores, el fracaso de la gestión es achacable antes a la mala política oficial, secundada por la entidad Cinespaña, dedicada exclusivamente a promover el cine español en el mundo, que a la mala calidad del último cine español. Cuando en ocasiones anteriores se han producido las mismas ausencias, los asistentes al festival se sorprendían al comprobar que algunas de las películas presentadas por otros países carecían del rigor de las españolas rechazadas.

Una leve colaboración económica en el filme cubano Cecilia Valdés es la única intervención española.