La OTAN rechaza la 'oferta' de Moscú sobre los misiles SS-20

El secretario general de la Alianza Atlántica, Joseph Luns, afirmó ayer en Bruselas que la Unión Soviética ha instalado ya prácticamente el número total de misiles SS-20 que, según los análisis aliados, tenía calculado. Luns criticó duramente la oferta soviética de suspender unilateralmente la instalación de estos misiles y, subrayó el total apoyo de la OTAN a Estados Unidos en las negociaciones de Ginebra.El Consejo Atlántico, compuesto por los representantes permanentes de los quince países aliados, se reunió durante la mañana con el jefe de la misión norteamericana en Ginebra, Paul Nitze, quien explicó "el estado de las negociaciones" y aseguró que Washington sigue dispuesto a discutir con la Unión Soviética una auténtica opción cero, es decir, el desmantelamiento de todos los SS-20 a cambio de no instalar los 572 euromisiles Pershing 2 y Cruise.

Tanto Nitze como Luns pusieron de relieve la voluntad negociadora de Estados Unidos sobre bases realistas y no sobre "ofertas dirigidas a las opiniones públicas europeas", tal y como hace, según ellos, Moscú.

Los aliados, de acuerdo con fuentes oficiosas, insistieron en la necesidad de estrechar las consultas internas entre los quince y en su deseo de que Washington continúe manteniéndoles estrechamente informados sobre el desarrollo de las conversaciones de Ginebra, que han sido suspendidas momentáneamente hasta dentro de los meses.

Luns comentó las recientes declaraciones de Breznev y lamentó irónicamente que la pretendida moderación soviética no se hubiera apreciado antes de haber instalado trescientos nuevos misiles, con novecientas cabezas nucleares, que son, dijo, una amenaza contra la OTAN. Resaltó también que la oferta de Moscú se reduce a los misiles instalados en suelo soviético europeo y no a los que se despliegan al este de los Urales y que son también un riesgo para Occidente, dada su movilidad.

Según Luns, la decisión de Moscú supone simplemente congelar una situación de ventaja a su favor que ya existe, puesto que los europeos no cuentan aún con ningún armamento equivalente al SS-20.

Los primeros euromisiles no llegarán a Europa occidental hasta finales de 1983.

Fuentes oficiosas resaltaron la satisfacción de la Alianza Atlántica por la respuesta europea a las declaraciones hechas el martes por el líder soviético, Leónidas Breznev.