Washington y Tel Aviv firmaron un acuerdo de cooperación estratégica antisoviética

Estados Unidos e Israel firmaron el lunes por la noche un acuerdo de seguridad y cooperación estratégica para resistir "las amenazas al Oriente Próximo provocadas por la Unión Soviética o por fuerzas exteriores a la región controladas por Moscú". El pacto prevé la realización, en un futuro próximo, de maniobras aéreas y navales conjuntas norteamericano-israelíes en el Mediterráneo oriental

La Firma de este acuerdo y las perspectivas favorables para que Tel Aviv acepte la participación de cuatro países europeos (Reino Unido, Francia, Italia y Holanda) en la fuerza de paz del Sinaí representan una mejora en las relaciones entre Estados Unidos e Israel, muy tensas en los últimos meses, tras la venta por la Administración Reagan a Arabia Saudí de aviones AWACS.Los ministros de Defensa de los respectivos Gobiernos, Caspar Weinberger y Ariel Sharon, hicieron público el acuerdo al final de una reunión celebrada en el Pentágono. "El pacto está destinado a permitir a nuestros dos países actuar conjuntamente y a prestarse mutuamente asistencia para contrarrestar las amenazas a la seguridad de la región causadas por la Unión Soviética o por fuerzas de la zona controladas por Moscú", asegura un comunicado conjunto.

La singularidad del acuerdo es que no compromete a Estados Unidos a defender Israel, sino simplemente prevé la cooperación en la lucha contra un intento de penetración soviética en el Oriente Próximo, ya sea directa o a través de sus satélites, lo que se interpreta como una alusión, por ejemplo, a Cuba y Libia.

Israel quería que el acuerdo estratégico y de seguridad fuera lo más detallado posible y se refiriera explícitamente a la instalación en territorio israelí de tanques y otras armas norteamericanas para ser utilizadas eventualmente si se desatara un conflicto en la zona.

La Administración Reagan, sin embargo, temerosa de provocar recelos en sus amigos árabes por la suscripción de un acuerdo de seguridad con Tel Aviv, logró que el texto del pacto contenga únicamente consideraciones generales de principios y haga tan sólo referencia a la celebración en el Mediterráneo oriental de maniobras conjuntas. El acuerdo abre la puerta a la posibilidad de que el Ejército israelí mantenga y repare portaviones de Estados Unidos.

Evitar suspicacias

Estados Unidos no tiene firmado ningún acuerdo similar con países árabes, a pesar de mantener estrechas relaciones de cooperación militar con Arabia Saudí, Egipto y Jordania. Para evitar suspicacias, el pacto dice que "la cooperación norteamericano-israelí en materia de seguridad no va dirigida contra ningún Estado o grupo de Estados de Oriente Próximo".

La mejora de relaciones entre Washington y Tel Aviv ha hecho posible que Israel acepte la participación europea en la fuerza de paz del Sinaí, que ha de entrar en funciones unas semanas antes de que el Gobierno israelí retire sus soldados, en abril, de los territorios ocupados en esa península durante la guerra de los seis días.

El Gabinete que preside el primer ministro Menájem Beguin ha aceptado la presencia europea, aunque ha pedido a la Administración Reagan una serie de aclaraciones. Estados Unidos e Israel emitirán conjuntamente un comunicado que indique que la participación de Francia, Reino Unido, Italia y Holanda en la fuerza de paz no implica que asuman las opiniones de los Gobiernos de esos países sobre el papel de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en las negociaciones de Oriente Próximo.