Cerca de 40 millones de pesetas destina la Generalidad de Cataluña a subvenciones para el teatro

El Departamento de Cultura de la Generalidad de Cataluña hizo pública ayer la concesión de ayudas y subvenciones a un total de veintisiete compañías y grupos teatrales catalanes, así como a tres salas de teatro de Barcelona. El valor total de las ayudas es de 39.100.000 pesetas. Las subvenciones van desde las 100.000 pesetas a los cinco millones y medio.

Entre las compañías subvencionadas destacan la Compañía del Teatro Lliure, que recibirá cinco millones y medio de pesetas por el montaje y mantenimiento de Fulgor y muerte de Joaquín Murrieta, de Pablo Neruda, en versión catalana del poeta Miquel Martí Pol. Los grupos Els Comediants y Els Joglars recibirán cada uno cuatro millones por los montajes de Apoteosic sarau de Gala y Olympic man movement. Pere Planella recibirá tres millones por el montaje de Marat Sade, de Peter Weis, en traducción catalana de Felíu Formosa. La compañía de Enric Majó recibirá igual cantidad por su montaje de Terra baixa. El resto se reparte en ayudas mayoritariamente de 250.000 pesetas.La concesión de estas ayudas ha sido acogida con desigualdad por parte de los profesionales del teatro. Por un lado se valora el esfuerzo realizado por la Generalidad para organizar un sistema de subvenciones de manera rápida y atendiendo a que los traspasos se dieron el pasado mes de junio.

Sin embargo, algunas de las compañías se mostraron quejosas por el sistema empleado, al que calificaron de parche para intentar suavizar las tensiones entre la gente del teatro catalán y la Generalidad. Estas tensiones tuvieron su máxima expresión tras los intentos de censurar el contenido de una obra que debía representarse en el teatro Romea, convertido en Centro Dramático de la Generalidad. Este intento de censura motivó la dimisión del responsable de Teatro de la Consejería, Xavier Fábragas.

Por otra parte, algunas de las subvenciones son inferiores a las que otorgó el Ministerio de Cultura a las compañías teatrales catalanas en años anteriores. Así, Els Joglars recibió seis millones en 1980, mientras que este año sólo son cuatro, y Teatro Lliure recibirá siete y medio este año, y en 1980 recibió casi once millones. Según representantes de estos grupos, la cuantía de las subvenciones es ridícula en comparación con el dinero destinado al Centro Dramático de la Generalidad, en la actualidad personificado en el teatro Romea, cuya gestión, validez y aprovechamiento son puestos en entredicho por tales grupos.

Un representante de uno de estos grupos señaló anoche a este diario que muchos de los grupos y compañías estarían de acuerdo en que las subvenciones se aplicaran en base a criterios de bonificación por espectadores asistentes a los espectáculos.

Por otra parte, el consejero de Cultura del Gobierno autónomo, Max Cahner, anunció ayer que el director de teatro Hermann Bonnin elaborará, junto con el consejo asesor de teatro de la Generalidad, un proyecto para encauzar definitivamente las tareas del Centro Dramático de la Generalidad.