_
_
_
_
_

Una parábola vitalista

El director alemán Friedo Solter plantea el montaje de la obra Un hombre es un hombre, de Bertolt Brecht, de próximo estreno en Madrid, con varios elementos potenciados por una de las personalidades que más han influido en el teatro contemporáneo. «Brecht ponía mucho acento en que los pensamientos no salieran en forma filosófica, sino como expresiones vitales y concretas del ser humano».Brecht incorporó elementos del teatro de variedades, popular, de la Comedia del Arte, de su admiración por Chaplin y Karl Valentin», añade Friedo Solter. «En su montaje de Un hombre es un hombre, en 1931, los soldados de la obra actuaban sobre zancos, los hombros eran acentuados por unas perchas enormes, de esta forma parecían monstruos en la pista de un circo. Nosotros, hemos tenido en cuenta este estilo de los payasos y de la Comedia del Arte, ya que no es una obra naturalista ni psicológica».

Más información
El director alemán Friedo Solter prepara en Madrid un montaje de Bertolt Brecht

Para su director, Un hombre es un hombre «es una obra de parábola, que muestra cómo el ser humano puede ser manipulado y utilizado en contra de su voluntad. Es una obra sobre la búsqueda de la identidad, pero el protagonista se convierte en un producto de un ambiente agresivo. Esperamos contar de una manera divertida en qué condiciones de peligro estamos viviendo. En este sentido, la obra es muy actual. Con esta obra de Brecht no vamos a ofrecer un índice pedagógico o una velada didáctica, sino un tema divertido e interesante; creo que es algo bastante nuevo y sorprendente».

Opina que a Brecht no se le debe envolver en discusiones abstractas.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_