Catalán de suburbio.
Día a día crece en Cataluña una nueva cualidad de ciudadano. Catalán de suburbio. Es un espécimen híbrido: nacido en Cataluña, de idiorna castellano. Su cultura es suburbial, de esa misma esencia que hizo del castellano lengua universal, rica entre las ricas.Este suburbial, en parte aragones, catalán, andaluz.... con los dones, demostrados, de la paciencia, comprensión y solidaridad, repulsa con energía -aunque apenas manifiesta- la ciudadanía títere. Tiene información. Sabe, a pesar de que no lo dicen los políticos, que las barras del escudo de España simbolizan a Aragón. Desea historia y no leyendas nacidas del fin que justifica los medios. No se conforma cuando dicen los libros de texto: el Ebro es el principal río de Cataluña. Nace en tierras lejanas... Y busca, huyendo de la ignorancia impuesta, quiénes son esas tierras, bebedoras de la misma agua, parte de su propia cultura. Cultura que reivindica el libro y no la espada. Cultura que tiene por bandera la crítica y la razón./
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