La financiación de las administraciones públicas en 1981 requiere 700.000 millones, según García Añoveros
El incremento de un 11% en el número de declaraciones sobre la renta presentadas este año con respecto al ejercicio anterior, las previsiones de los distintos déficit públicos para 1981 (unos 699.000 millones de pesetas para la financiación del sector de la Administración pública en el presente año) y las escasas repercusiones para la recaudación, de la declaración de inconstitucionalidad de un artículo de los Presupuestos del Estado (véase EL PAIS del martes y miércoles últimos) fueron los temas más destacados abordados ayer, en conferencia de Prensa, por el ministro de Hacienda, Jaime Carcía Añoveros.
El ministro, en el capítulo relativo a las declaraciones sobre renta y patrimonio, reconoció que «no se está en el tope de recaudación. Con una mejor gestión, sin alterar los tipos impositivos, se podría recaudar más». Las cifras expuestas por García Añoveros, que confirman las adelantadas por este diario el pasado domingo, fueron, en síntesis, las siguientes: se presentaron 5.949.042 declaraciones correspondientes a renta de las personas físicas en 1980 (de ellas, 2.100.000 tienen derecho a devolución, 476.000 son negativas y 3.280.000 son positivas). Las declaraciones con derecho a devolución suponen un incremento sobre las de 1979 de un 125,65 %, mientras que las declaraciones positivas y negativas disminuyen, respectivamente, en un 14,22% y un 15,13%.El incremento de retenciones en 1980 sobre 1979 fue del 59,15%. Sobre rendimientos del trabajo y actividades profesionales, la retención alcanzó, en 1980, los 542 millones de pesetas, y sobre rendimientos de capital, los 54 millones.
Incremento de recaudaciones
El ministro dijo que calcula un incremento de la recaudación (retención y pagos) del orden del 30%, sobre las declaraciones efectuadas el pasado año. García Añoveros manifestó también que el 80% de las declaraciones correspondía a rentas inferiores al millón de pesetas. En opinión del ministro, las líneas básicas que han caracterizado la recaudación de este año por este impuesto han sido: aumento de las declaraciones con derecho a devolución (consecuencia del incremento de las retenciones), descenso del número de declarantes que ingresan, y numerosas declaraciones defectuosas o que no se han realizado. El número de declarantes que no han presentado declaración, según el ministro, podría oscilar entre 500.000 y 600.000 personas.
García Añoveros presentó también una amplia información sobre las distintas previsiones de déficit públicos para 1981, a la vista de la evolución de las distintas magnitudes en lo que va de año. El déficit presupuestario para 1981 se estima en estos momentos que ascenderá a 447.802 millones de pesetas (unos 55.000 millones más de lo previsto en los Presupuestos). El déficit del Estado (en términos de caja) se sitúa actualmente en 542.802 millones de pesetas (frente a las estimaciones iniciales de 391.887 millones). Las desviaciones más significativas se atribuyen a una mayor aportación del Estado al seguro de desempleo (8 1.000 millones) y a la diferencia neta en créditos extraordinarios y ampliables (37.864 millones).
La apelación total del sector público al Banco de España, según el presupuesto monetario para 1981, se fija ahora en 572.650 millones (frente a las estimaciones iniciales de 360.609 millones). El recurso del Tesoro al Banco de España se sitúa en 402.150 millones de pesetas.
García Añoveros, hablando ya en términos de contabilidad nacional, se refirió a la financiación de la Administración pública para 1981 (véase el cuadro adjunto). Recordó su reciente polémica con Rafael Termes, presidente de la patronal bancaria, en las páginas de EL PAIS (días 28 y 30 de junio, y 5 y 7 de julio), y reafirmó su opinión de que en términos estrictos no puede hablarse en este caso de déficit. Explicó el mayor déficit del Estado por una menor recaudación de la prevista, mayores desgravaciones a la exportación y menores ingresos por rentas de petróleo (especialmente gasolinas).
García Añoveros, más adelante, se congratuló del fallo del tribunal Constitucional sobre las impugnaciones socialistas a los Presupuestos del Estado para 1981. «Sólo ha declarado inconstitucional el artículo 38, que tiene una escasa incidencia en cuanto a lo dejado de recaudar. No creo que sobrepase en ningún caso los trescientos millones». Hacienda ha dictado una orden, según dijo, por la que se otorgará un plazo de rectificación hasta junio de 11)82 para aquellos que se vean afectados por la sentencia en sus decIaraciones ya realizadas.
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