Se hace pública la composición de los aceites tóxicos

La presencia de aceite de colza es la característica común a los cuatro tipos de garrafas sin etiqueta, comercializadas clandestinamente, que han sido estudiadas en el Centro Nacional de Alimentación y Nutrición, según han informado a Europa Press en medios técnicos, que también han facilitado la composición de las mezclas envasadas con etiqueta.También es común en los cuatro casos la presencia de anilina y el olor a aceite de oliva. En dos de ellos, el aceite de colza está mezclado con semillas vegetales, y en uno con grasas animales. Sólo en uno de los cuatro tipos de garrafas hay mayor contenido de semillas vegetales que de aceite de colza, elemento predominante en los otros tres.

Por lo que respecta a los envases con etiqueta y en comercio, también ilegal por carecer de registro sanitario, la marca JAP presenta una composición de semillas vegetales, aceite de colza, grasas animales y olor a aceite de oliva. La marca Pochi es un compuesto de semillas vegetales, con colorantes azoicos tóxicos, diferentes de la anilina. Idéntica composición a esta última se encuentra en las marcas Prosol y Beamonte Magaña. Finalmente, el análisis de la marca El Olivo ha revelado una composición de aceite, de colza, olor a aceite de oliva y presencia de anilina.

El industrial que fabricaba la última marca citada, Florencio Feijóo, ha sido detenido en Barcelona, según informa Europa Press. Extremeño de origen, Florencio Feijóo, que fabricaba el aceite El Olivo, presentándolo como puro de oliva y con la falsa procedencia de la Cooperativa Agraria de Jaén, había sido sancionado hace tiempo por el Ministerio de Agricultura, que le había impuesto una multa de doce millones de pesetas por adulteración de aceites y que, al parecer, no ha pagado.