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Divergencias ideológicas amenazan la cohesión de la Alianza Atlántica

Son muchos los líderes políticos, diplomáticos y expertos en relaciones internacionales de Europa y Estados Unidos que creen que la Alianza Atlántica se enfrenta a una creciente erosión y parálisis en su capacidad para lidiar con la Unión Soviética.

En un reciente discurso ante una audiencia europea, Lawrence Eagleburger, secretario de Estado adjunto para Asuntos Europeos atribuyó parte de los problemas a la forma tan distinta con que se analizan los beneficios de la distensión. "La distensión para vosotros, para los berlineses, para los alemanes, constituye una diferencia", dijo, en Viena, "pero para nosotros la distensión ha sido un fracaso".Un alto funcionario francés, que no desea ser identificado, y cuyas observaciones son típicas de las que se suelen escuchar en Europa, habló de un problema de seguridad como más profundo. "Estados Unidos solía representar una protección frente al riesgo", comentó' en una entrevista concedida en París, "Ahora representa protección y riesgo; o, para muchos europeos, sólo riesgo".

The Economist, el influyente semanario británico, comentó recientemente en un editorial que la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) se encuentra en el "primer estadio" de una "enfermedad mortal". Seymour Weiss, un influyente asesor de la Administración Reagan, confirmó en una entrevista lo que los funcionarios tan sólo comentan en privado: "No nos sorprendería que en tres años la OTAN dejase de funcionar".

Desde siempre, todos los años surge algún problema en el seno de la Alianza: cómo tratar con Moscú, los riesgos y la moralidad de estacionar armas nucleares en Europa, el papel de la OTAN fuera del escenario europeo, la posibilidad de que las tropas norteamericanas abandonen Europa o la participación de los aliados en el presupuesto común. Pero lo grave en estos momentos es que han vuelto a resurgir todos los problemas a la vez, y resulta mucho más difícil hacerles frente debido a la aparición de un nuevo elemento ideológico.

La política ideológica ha renacido por la izquierda en Europa y por la derecha en Estados Unidos, provocando puntos de vista cada vez más opuestos y generando suspicacias mutuas.

La izquierda en Europa -el Partido Laborista británico, el ala más radical del Partido Socialdemócrata alemán y el Partido Socialista de Francia, por ejemploestá volviendo a sus raíces ideológicas, al insistir en temas tales como el desarme, la solidaridad obrera internacional, la ayuda a las naciones y pueblos oprimidos y la solución pacífica de los conflictos. En cambio, en la Administración Reagan la búsqueda de las raíces pasa por un ferviente nacionalismo y una especie de aislamiento. Unido todo.ello a la decisión de no desviarse un ápice de la línea antisoviética, con o sin los europeos.

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Presiones aliadas

Los Gobiernos aliados han venido presionando al equipo Reagan para que se muestre mas nioderado en sus polémicas, por considerar que rezuma un militarismo innecesario. Se describen como favorables a las negociaciones, si Moscú así lo desea, y retratan a la Administración norteamericana como una colección de fríos guerreros,

No obstante, existen importantes figuras en la Administración que se niegan a cualquier concesión en este campo. En privado, muchos de ellos califican a los europeos de vichyitas (referente a los franceses que colaboraron con Hitler), neutralistas y pacifistas, y defienden que lo que los europeos necesitan es un tratamiento de choque y no buenas palabras, "para ver si así reaccionan".

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