Los campesinos de la cornisa cantábrica denuncian la política ganadera del Gobierno

Los sindicatos campesinos democráticos de la cornisa cantábrica acordaron, en una reunión celebrada en Oviedo, denunciar la política ganadera del Gobierno central que conduce a una clara ruina de los pequeños y medianos ganaderos de la zona sin ofrecer ninguna alternativa. Dicha política -argumentan- está pensada en beneficio exclusivo de la industria y las grandes explotaciones ganaderas y en función de dejar un mercado libre a los productos ganaderos europeos ante el ingreso de España en la Comunidad Económica Europea (CEE).Los sindicatos campesinos del Norte, -que están dispuestos -a participar en las próximas negociaciones globales de precios y campañas promovidas por la Administración, continuarán oponiéndose al Estatuto de la Producción Lechera y exigirán, como alternativa, un reglamento de comercialización de los productos ganaderos (carne y leche) y la elaboración de planes agrarios en las distintas nacionalidades y regiones con su participación.

En la reunión de Oviedo fue analizado el continuo descenso del nivel de renta y poder adquisituivo de los pequeños y medianos campesinos de la cornisa cantábrica, debido al constante incremento de los costes de producción y al estancamiento real de los precios al productor.

Las cuantiosas importaciones de productos ganaderos o para la ganadería también inquietan a los campesinos. Dichas importaciones ascendieron en el período enero-octubre de 1980 a 108.437,6 millones de. pesetas. Existen en la actualidad importantes excedentes lácteos generados por las importaciones, la baja del consumo, y por los esfuerzos por aumentar la producción para mantener los mínimos ingresos.