Madrid solicitará a la CEE una reunión inmediata sobre pesca

Viene de primera página

«No vamos a ceder en los acuerdos pesqueros con la CEE, porque, si lo hiciéramos, en pocos años habría desaparecido nuestra ,flota y. con ella el problema de la pesca; pero no es este el camino», manifestaba a primeras horas de ayer, en, declaraciones a Radio Nacional, Jaime Lamo, ministro de Agricultura. Horas después, en la sede de su Ministerio, se reunía con veintidós armadores afectados por el contencioso pesquero con la CEE para estudiar conjuntamente la situación. En esta reunión, según manifestaciones del presidente de los armadores, Etchevers, al término de la misma, el ministro solicitó y consiguió el apoyo de los armadores a la estrategia negociadora del Gobierno.

En la mencionada reunión, los armadores plantearon, según la citada fuente, una negativa absoluta a la política de cesiones a la CEE, el rechazo de la oferta de 115 licencias comunitarias; y el corte radical de las importaciones de pescado procedentes de los diez si no se muestran más flexibles en la negociación.

«El objetivo de la CEE», manifestó Etchevers, «es clarísimo: desmantelar la flota pesquera española, suprimir a España como potencia pesquera. y vender su pescado en nuestro país. A eso no estamos dispuestos los armadores, porque eso es un chantaje».

En la reunión con el ministro se habló también, según los armadores, de las ayudas para hacer frente a la situación actual de amarre forzoso en los puertos, y se trató también de las aportaciones de la Administración española para poder superar esta crisis del sector, aunque no se han Fijado cantidades concretas.

Los armadores manifestaron también que «la CEE se está portando como lo que es: como un mercado, y trata a España con mentalidad de mercado. En consecuencia, a esta postura hay que responder con otra de dureza y claridad, porque de lo contrario nos va a llevar al desastre a toda la flota».

En una nota del mencionado presidente de los armadores, que contesta sin citarlo un editorial publicado por este diario (véase EL PAIS de ayer), en el que se criticaba la improvisación con que se afrontan estas negociaciones pesqueras y la falta de planificación y objetivos a medio plazo para el sector, se dice que «en las presentes circunstancias en que el sector apoya rotundamente la gestión de la administración pesquera, no comprendemos cómo algunos periodistas, con evidente desconocimiento y completamente fuera de onda de la rivalidad actual, afirmen temerariamente que la negociación con la CEE peca de improvisación y de eficacia. Ni hay improvisación ni hay ineficacia en la actual política pesquera, porque no se pueden achacar los resultados insatisfactorios a una falta de planificación de nuestras autoridades, sine a la tozudez de que hacen gala constantemente las autoridades comunitarias, pretendiendo destruir una actividad tan importante como las de la flota del norte y noreste de España».

Difíciles perspectivas de acuerdo con Portugal

Representantes de los armadores del sector «pesca de arrastre» de la región suratlántica participarán el próximo lunes, en Lisboa, en la nueva fase de negociaciones que van a desarrollarse entre una delegación española y otra portuguesa para la firma de un nuevo acuerdo pesquero entre ambos países, informa desde Huelva Alfonso González.

En opinión, del representante onubense en las mencionadas negociaciones, Salvador lvars, no existen buenas perspectivas de llegar a un acuerdo inmediato para establecer un nuevo plan de pesca para 1981. Según Ivars, la administración pesquera portuguesa sigue empeñada en reducir en más de un 50% el número de licencias con relación a las otorgadas el pasado año. Concretamente -ha añadido- el número de licencias para la región suratlántica podría reducirse de 44 a20.

Por otra parte, hay cierto pesimismo en el sector pesquero andaluz sobre la postura que van a seguir manteniendo las autoridades lusas en los conflictivos temas de las zonas de veda (implantadas unilateralmente por el Gobierno portugués) y el porcentaje de mariscos que tienen proyectado exigir. De no clarificarse ambos temas, según un representante de los armadores de Huelva, está demás que se estudie el tema de las licencias, ya que, ante las drásticas restricciones portuguesas, va a ser imposible seguir faenando en el caladero del Algarve.

Las pretensiones españolas se circunscriben a mantener el número actual de licencias, incrementar los porcentajes actuales de pesca de marisco (que son el 60% de las capturas) y establecer un nuevo acuerdo bilateral sobre zonas de veda. La Administración portuguesa y los armadores andaluces coinciden en la necesidad de sustituir la renovación del actual acuerdo por un nuevo pacto pesquero entre ambos países.