Aprobado el presupuesto global de la Seguridad Social

El Pleno del Congreso prolongó ayer sus debates hasta pasada la una de la madrugada. En esta parte se aprobó el Presupuesto de la Seguridad Social y los artículos 1 y 2 del proyecto de Presupuestos Generales. Ambas cosas fueron fuertemente objetadas por la izquierda. Especialmente, los socialistas acusaron al Gobierno de querer desmantelar la Seguridad Social.El ministro de Sanidad y Seguridad Social, Alberto Oliart, presentó el presupuesto de este organismo, señalando las difícultades económicas que impiden atender la demanda de necesidades, y afirmó que la propuesta socialista de ampliar en 223.000 millones es inaceptable.

El portavoz del PSOE, Ciriaco de Vicente, replicó que «esa pretendida falta de recursos es la coartada del Gobierno para justificar la progresiva reducción de la cobertura de la Seguridad Social, para dar entrada en el mercado a la iniciativa privada, e insistió en que hay una infravaloración deliberada de recursos. Por su parte, Emérito Bono, del PCE, se quejó de que no se han tenido en cuenta los criterios de trabajadores y empresarios.

El diputado de UCD José Miguel Bravo y el propio ministro replicaron a la izquierda. Oliart dijo que eran erróneos los cálculos sobre recursos de los socialistas, y al insistir éstos en sus tesis, añadió que es ridículo tachar al Gobierno de querer desmantelar la Seguridad Social, cuando en todo caso esa cuestión a afectaría sólo a 30.000 millones entre más de dos billones, y acabó acusando a los socialistas de querer equivocar a la opinión pública, entre los aplausos centristas y la bronca de la oposición.

Finalmente, se debatió la enmienda socialista al artículo 1, que pretendía aumentar los Presupuestos en más de 250.000 millones. Enrique Barón insistió en que el proyecto del Gobierno es conservador y supone un giro a la derecha, y, Carlos Solchaga explicó que la filosofía socialista consiste en aumentar el déficit estatal hasta un 4,5% del producto interior bruto, que sería absorbido en varios años, gracias a la recuperación de la crisis que el aumento del Presupuesto durante esos años permitiría. La tesis gubernamental es que ese mayor déficit sólo se financia con más inflación, y esto equivale a profundizar la crisis.