Las soluciones pasan por el consenso político

Miguel Angel Arredonda, diputado del PSA en el Congreso de los Diputados y representante de su partido en la Junta de Andalucía, piensa que la crisis económica tiene un efecto multiplicador sobre las regiones subdesarrolladas. En el campo no hay segundos empleos o subempleos como en las ciudades industriales, además de no existir subsidio de desempleo. Las dificultades de la pequeña y mediana empresa, que, por otra parte, tiene escaso peso en Andalucía, y el retorno de los emigrantes, explican la gravedad de la situación andaluza.Los ayuntamientos, en esta situación, tienen que hacer frente a la distribución de los fondos del empleo comunitario como una obligación más a los muchos problemas que ya tienen. Los parados recurren a los ayuntamientos como si en la mano de éstos estuviera la concesión de unos fondos que dependen del Gobierno, de ahí el deterioro que sufren. Por otra parte, como ha puesto de manifiesto Marinaleda, el peso de los sindicatos es mucho menor en el campo que en las zonas industriales. «Marinaleda fue el cabreo colectivo de un pueblo. Hay que poner soluciones, porque si no el desencanto de Andalucía se transformará, con toda seguridad, en radicalismo, y entonces quien predique la violencia se llevará el gato al agua».

Para Arredonda hay que atajar primero un problema de tensión social que es casi de orden público, y en segundo lugar, establecer las bases para el desarrollo de la región. El diputado del PSA teme que hayan levantado expectativas con el PUA que luego no vayan a cumplirse y se defraude una vez más al pueblo andaluz. Para su partido era mejor haber elaborado un plan de exigencias mínimas y concretas al Gobierno y, en todo caso, elaborar un abanico de alternativas para el desarrollo andaluz; pero no hablar de un programa económico, cuando su realización está fuera de la Junta depende del Gobierno de UCD. No obstante, han permanecido en la comisión redactora y han suscrito el PUA, pese a su temor de que, al final, todo quede en papel mojado y el pueblo pueda quedar defraudado.

Miguel Angel Arredonda, por otra parte, piensa que hay que trabajar todos los partidos juntos para sacar a Andalucía de su postración. «En estos momentos el desprestigio de un partido es el desprestigio de todos. Con tal de que lleguen los fondos para Andalucía, que los rentabilice políticamente quien quiera».