_
_
_
_

La URSS sólo intervendrá si Gierek pierde el control de la situación

A pesar de los graves acontecimientos que se vienen produciendo en Polonia, en Moscú no se ha detectado ninguna señal de nerviosismo y da la impresión de que los dirigentes soviéticos se conforman, de momento, con «dejar hacer» a Gierek.De hecho, en ausencia de Leónidas Breznev, de vacaciones en Crimea, resulta difícil dar el nombre de algún dirigente de primera línea que esté trabajando en Moscú.

El único miembro del Politburó mencionado recientemente por la prensa es Nikolai Tijonov, que presidió el último Consejo de Ministros, al no estar presente Alexei Kosiguin. Este, «número dos» del régimen, parece encontrarse nuevamente enfermo, y el «número tres» Mijail Suslov, del que se había destacado la ausencia en la jornada inaugural de los Juegos Olímpicos, todavía no ha aparecido en público.

Más información
El Gobierno trata de romper el frente unido de los huelguistas
El PCE y CC OO apoyan a los trabajadores polacos
El coste económico de la huelga

Una situación como esta no tiene nada de extraordinaria en el mes de agosto, y más si se tienen en cuenta los constantes problemas que para el ejercicio del poder en la URSS presentan la edad y el estado de salud de los dirigentes soviéticos. Quizá por todo ello nada deje translucir el que se pueda estar preparando alguna intervención, en los asuntos polacos.

Nadie se arriesga a negar en Moscú que una intervencíón de este tipo pueda llevarse a cabo si el régimen socialista se ve amenazado, pero la impresión general en los medios diplomáticos occidentales es que la URSS no se comprometerá en una operación tan grave, a menos que los acontecimientos escapen totalmente al control de Gierek.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Interferidas emisiones de radio

Cuando el líder polaco fue recibido hace tres semanas por Breznev en Crimea se hizo público un comunicado oficial en el que se destacaba que los dos dirigentes estaban totalmente de acuerdo. La Prensa soviética, al dar cuenta ayer del discurso de Gierek, televisado el lunes, hace hincapié en que el primer secretario del Partido Obrero Unificado Polaco cuenta con el apoyo y la confianza de la URSS.

Pravda, al referirse al conflicto polaco, no utiliza en ningún momento la palabra huelga, sino que habla de «interrupciones laborales». El órgano oficial del partido comunista de la URSS hace especial menclón de la denuncia de Gierek sobre «los intentos de utilizar las interrupciones laborales con fines políticos hostiles por parte de distintos elementos irresponsables, anarquistas y antisocialistas».

Las autoridades soviéticas, además, parecen haber ordenado el martes la interferencia de las emisiones en ruso de la Voz de América y de la BBC, a falta de una explicación soviética, la reanudación de las interferencias se atribuye a la situación polaca. Con motivo de la invasión de Checoslovaquia también fueron interferidas las emisiones del exterior.

Los 35 signatarios del Acta de Helsinki -la URSS entre ellos- se comprometieron a mejorar la difusión de las informaciones radiofónicas., «en interés de la comprensión mutua».

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_