Asesinado en Italia un segundo magistrado en cuarenta y ocho horas
Las Brigadas Rojas volvieron a asesinar ayer en Roma a otro magistrado, Girolamo Minervini, ex jefe de la Secretaría de la Dirección de Cárceles Italianas, mientras las fuerzas políticas se preparan a abordar una de las crisis de Gobierno más difíciles y oscuras de los últimos tiempos.Después de haber reivindicado el asesinato en Salerno del fiscal de la ciudad, Nicola Giacumbi, que en un primer momento se habían adjudicado las Patrullas Comunistas (marxistas-leninistas), las Brigadas Rojas dispararon ayer por la mañana, en Roma, contra un famoso magistrado: Girolamo Minervini, de 61 años. sustituto del fiscal del Tribunal de Segunda Instancia, uno de los fundadores de Magistratura Democrática, que es el grupo de magistrados más progresistas. El magistrado asesinado era también uno de los iniciadores de la reforma penitenciaria, que se había caracterizado, aun en pleno auge de la violencia terrorista, por sus propuestas a favor de los terroristas detenidos en las cárceles especiales para que fuesen tratados con el máximo respeto.
El asesinato de este magistrado ha golpeado aún más, si cabe, a la opinión pública por el modo como fue realizado: en pleno día, en un autobús municipal abarrotado de gente. Cuatro «brigadistas» habían subido con el magistrado en el autobús que éste tornaba cada mañana para ir a trabajar, quizá para evitar el peligro de ir en coche. En una zona de intenso tráfico le dispararon por la espalda y cuando cayó al suelo le dieron el golpe de gracia en la nuca. En la confusión fueron heridos otros tres pasajeros. Con las pistolas en la mano obligaron al conductor a abrir las puertas y desaparecieron en un coche de cómplices que había seguido al autobús. El pánico de la gente dentro del autobús fue indescriptible.
Todas las fuerzas políticas y las centrales sindicales han reaccionado con dureza y preocupación a este nuevo y espectacular delito, que a los cuarenta minutos fue reivindicado por las Brigadas Rojas en un comunicado. Precisamente en la misma mañana de ayer se estaba celebrando en Turín el juicio de un grupo de brigadistas acusados del asesinato del juez Coco.
Ni que decir tiene que este nuevo recrudecimiento del terrorismo no dejará de tener repercusiones en la crisis de Gobierno que se abrió ayer, en medio de una gran incertidumbre. El presidente de la República, Pertini, que dentro de unas semanas visitará España, ha anunciado que hará consultas rapidísimas y que probablemente el lunes mismo dará el nombre del nuevo encargado de formar Gobierno. Esta vez, Pertini ha querido escuchar también a los secretarios generales de las tres centrales sindicales más importantes del país: CISL, CGIL y UIL. Ahora todos los ojos están puestos en el comité central del Partido Socialista, que se reunirá en Roma hoy. De este encuentro podrá depender fundamentalmente el futuro Gobierno.
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