El PCE rechaza una propuesta socialista para solucionar la crisis de Duro Felguera

El enfrentamiento existente entre CCOO y UGT dividió ayer a los parlamentarios asturianos que se reunieron, a iniciativa del PSOE, para tratar la grave situación creada en Asturias por la huelga de Duro Felguera, la primera empresa privada de la región, cuyos 2.500 trabajadores secundan, desde hace casi dos meses, un paro promovido por CCOO para exigir la integración de la filial viguesa Censa en la sociedad asturiana.

El PSOE presentó a la reunión un documento, elaborado por UGT, que cuenta con la aceptación de Duro Felguera y la Administración. Los parlamentarios de UCD y AP le dieron también su apoyo, pero se opuso, el diputado comunista Horacio Fernández Inguanzu, alegando que podría ser aportado a las negociaciones como un documento de UGT. Ante la actitud de Fernández Inguanzu, los parlamentarios optaron por instar a las partes (empresa, centrales sindicales y Administración) a reunirse urgentemente para encontrar una salida al conflicto, comprometiéndose a gestionar Con la Administración las ayudas que puedan ser de su incumbencia. Un punto relativo a la convocatoria de un referéndum secreto entre los trabajadores para que se decida por cualquiera de las alternativas que en ese momento les sean presentadas fue también rechazado por el diputado comunista, por entender que sería negativo cerrar la huelga con vencedores y vencidos, además de significar una imposición.PSOE, UCD y AP estaban de acuerdo en solicitar de la Administración trescientos millones de pesetas para conseguir la normalización financiera de Censa, pero el PCE expuso su disconformidad, basada en la inexistencia de garantías sobre el destino real de ese dinero.