Primera exposición en España del pintor suizo Max Bill.
El director general del Patrimonio, Archivos y Museos, Javier Tusell, inauguró, a las doce de la mañana de ayer, en el Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid, la primera exposición que se realiza en España del pintor suizo Max Bill. En el acto estuvieron presentes el propio autor y los artistas españoles Chillida, Canogar, Pablo Serrano y Antonio Achaud, entre otros.La muestra, que acaba de ser exhibida en Venezuela, permanecerá abierta durante un mes. Ha sido patrocinada por el centro de artes plásticas de la Dirección General del Patrimonio Artístico.
El propio Max Bill ha supervisado el montaje de la muestra, que presenta por vez primera en España una gran colección representativa de su pintura, y que se encuadra dentro de lo que el pintor ha denominado «arte concreto».
Su obra ha sido considerada como una herencia directa de dos grandes corrientes del arte de nuestro siglo. Por una parte, de la obra neoplástica de Piet Mondrian, y por otra parte, de la línea constructiva del racionalismo promovido desde la República Federal de Alemania por la Bauhaus, en el período de entreguerras. Max Bill fue discípulo de esta última institución y prosiguió las enseñanzas de Walter Gropius, Mies van der Rohe, Paul Klee y Moholy Nagy, entre otras grandes figuras.
La producción artística de Max Bill no se reduce al campo de la pintura. Se extiende también a la escultura, área en la que ha conseguido diversos triunfos debido a sus formas continuadas. Otras aportaciones suyas se refieren al campo del diseño industrial y de la arquitectura. Los años cincuenta marcaron una época de especial trascendencia en su vida artística, principalmente los años en los que Bill dirigió la Escuela de Ulm (República Federal de Alemania), que intentó restablecer la tradición racionalista alemana después del período nazi.
