Un "marine" y dos paquistaníes, muertos en el ataque a la embajada de Estados Unidos en Pakistán

Una multitud enfurecida atacó ayer la embajada de Estados Unidos en Islamabad, capital de Pakistán, prendiendo fuego al edificio y amenazando las vidas de un centenar de norteamericanos, que consiguieron refugiarse en el último piso de la embajada hasta que el Ejército pakistaní pudo rescatarles y ponerles a salvo.El grave incidente añadió un nuevo elemento de tensión ala crisis que se registra en el área desde la ocupación de la embajada norteamericana en Teherán, hace dieciocho días. Un cabo de marines resultó muerto en el ataque, mientras que los informes sobre el número de víctimas entre los asaltantes eran contradictorios, pero daban un mínimo de dos muertos y setenta heridos.

Los exaltados manifestantes musulmanes, que coreaban eslóganes antinorteamericanos, prendieron fuego también a dos centros de información dependientes de la embajada, en Lahore y Rawalpindi, así como la biblioteca del consulado británico en esta última ciudad.

El asalto a la delegación diplomática, en el que participaron decenas de millares de personas, se originó, aparentemente, a causa de una información difundida por la radio pakistaní, en la que se achacaba a Israel y a Estados Unidos la paternidad de los incidentes registrados el día anterior en la gran mezquita de La Meca,

El presidente Jimmy Carter fue despertado a las cuatro de la madrugada del miércoles, hora de Washington, para recibir informes de este nuevo ataque contra una embajada norteamericana. Las autoridades de Pakistán colaboraron en todo momento con Estados Unidos, indicó ayer un portavoz gubernamental, quien negó rotundamente cualquier participación de Norteamérica en la ocupación de la gran mezquita de La Meca.

Los empleados de la embajada en Islamabad, que rondan el centenar, se refugiaron en una amplia habitación en el tercer y último piso del edificio, que está dotado de puertas blindadas. Durante unas horas, los norteamericanos pudieron así ponerse a salvo de los enardecidos atacantes, que gritaban «¡Muerte a los perros norteamericanos! » y « iMuera Carter! »

Disparos contra la multitud

El Ejército y la policía pakistaní abrieron fuego contra la multitud, sin que haya certeza sobre el número de víctimas. Finalmente, los norte americanos pudieron ser evacuados por el tejado del edificio y trasladados a la embajada británica. El portavoz del Departamento (le Estado, Thomas Reston, dijo ayer que no había noticias de víctimas norteamericanas

El portavoz calificó de «falsedad y mentira» las declaraciones hechas en la ciudad de Qom por el líder chiita iraní ayatollah Jomeini, que atribuyó a Estados Unidos la autoría del ataque contra la gran mezquita de La Meca. Este incidente, que finalizó ayer, fue provocado exclusivamente por musulmanes. En Washington se comentaba ayer que los ocupantes de la gran mezquita en la ciudad más sagrada del Islam eran fundamentalistas chiitas, la secta minoritaria musulmana, y muy probablemente seguidores espirituales de Jomeini.

El presidente Carter hizo un llamamiento a los dirigentes mundiales para que refuercen la protección de las embajadas norteamericanas, y el secretario de Estado, Cyrus Vance, convocó ayer a treinta embajadores de países islámicos.