Favorable acogida en Washington al anuncio de la liberación parcial de los rehenes
El Gobierno norteamericano recibió ayer favorablemente el anuncio de que parte de los rehenes retenidos en su embajada en Teherán iban a ser puestos en libertad en las próximas horas, por orden del ayatollah Jomeini, y el presidente Jimmy Carter urgió a las autoridades iraníes a que liberen al resto de los rehenes.
La Casa Blanca hizo pública una declaración presidencial en la que expresa su decisión de «continuar trabajando por todos los canales abiertos», hasta conseguir la liberación de los 62 ciudadanos norteamericanos capturados por estudiantes islámicos hace ya catorce días. Carter da la bienvenida al anuncio de la pronta liberación de las mujeres y los negros retenidos en la embajada, que se calcula son una docena, y desea que, «esta triste experiencia acabe pronto para ellos y puedan reunirse con sus familias».Anoche, en Washington se esperaba que la decena de rehenes fueran liberados en unas horas, especialmente después de que se confirmó que el hijo del iman Jomeini estaba en el edificio de la embajada, cumpliendo1nstrucciones de su padre. Inicialmente se pensaba enviar a los rehenes liberados a un hospital militar del Ejército norteamericano en Alemania Federal, para someterles a un examen médico exhaustivo.
El presidente Carter pidió a todos los norteamericanos que recen por los rehenes el próximo jueves, Día de Acción de Gracias, y por su pronta liberación sanos y salvos. Carter, en su mensaje a los norteamericanos para esta tradicional fiesta familiar, dice que «nos unimos al pueblo de todos los credos en todo el mundo que respeta los principios fundamentales de los derechos humanos y del derecho internacional. Estamos unidos con ellos para poner fin a los actos terroristas contra personas inocentes».
La decisión del ayatollah de poner en libertad a las mujeres y los negros suavizó un poco la tensa situación entre los dos países, pero en círculos políticos de Washington se temía ayer que esta concesión por parte del líder chiita suponga en realidad un largo cautiverio para los restantes rehenes.
El comportamiento del presidente Carter en esta crisis, mezcla de serenidad y de firmeza, le ha valido un fuerte apoyo de los norteamericanos y, si todo sale bien a largo plazo, podría influir en sus posibilidades de ganar la reelección en 1980.
La Policía Federal norteamericana (FBI) detuvo el viernes por la noche a siete hombres y una mujer, todos ellos iraníes, que intentaban pasar armas de contrabando, en un vuelo con destino a Nueva York, desde el aeropuerto de Baltimore. A los detenidos se les confiscaron varios rifles con mira telescópica y un plano de Washington en el que estaban marcadas varias embajadas, que la policía no identificó.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.