El Seminario de Etica organizado por la UNED fue un homenaje a Aranguren

La Universidad Nacional de Educación a Distancia acaba de celebrar en Madrid un seminario sobre Etica, que se inauguró con una conferencia del profesor José Luis L. Aranguren sobre Los textos vivos y la ética narrativo-hermenéutica. De esta conferencia pueden retenerse las siguientes concepciones: el hombre es un texto vivo que se narra a sí mismo; un actor y director de su escenario vital. Debe considerarse también muy importante la distinción que hizo el profesor Aranguren entre culturas textualizadas, es decir, vivas y dinámicas, y culturas gramaticalizadas, dogmáticas e inertes. En una armoniosa síntesis asumió todas las corrientes vivas de la filosofia contemporánea, demostrando, una vez más, la universalidad de su pensamiento. El seminario de Etica fue, en definitiva, un homenaje al filósofo español.El profesor Rodríguez Adrados, en su ponencia, La ética griega desde sus comienzos a la elaboración sofistica y platónica, interpretó la sofistica como reacción ilustrada a la moral tradicional de los ideales agónicos transmitida por los ponetas clásicos. La profesora de la Universidad de Oviedo Pilar Palop, en su conferencia Las antinomias de la razón educativa, analizó sistemáticamente las principales antinomias pedagógicas, organizándolas en dos bloques que corresponderían a dos diferentes opciones ético-sociales. A continuación, los profesores Cela Conde y Saoner, bajo el título En torno al concepto de simpatía, situaron históricamente la aparición de la filosofila moral inglesa y mostraron su carácter mediador para articular una moral del sentimiento con la economía política y la teoría social.

El profesor Jesús Rodríguez Marín, de la Universidad de Valencia, en su ponencia Razones y normas, disertó acerca de las normas como razones primarias que excluyen razones en conflicto en el cuadro de un código moral determinado. El profesor Nicolás Sosa, de la Universidad de Salamanca, dictó una conferencia titulada Etica y ciencia, en la que expuso que la ciencia no es nunca neutral y está en manos de una minoría dominante. Este punto de vista es compartido por el profesor Geymonat y, entre nosotros, por el biólogo Faustino Cordón. El profesor Sosa dedujo que era necesario un control social de la ciencia para evitar catástrofes y apocalipsis. Luego, la profesora Esperanza Guisan, de la Universidad de Santiago, en su ponencia Etica y política en Hobbes, insistió en la actualidad de este filósofo en una época tan preocupada y atemorizada por la omnipotencia del poder.

El profesor Tugendhat disertó sobre la pretensión absoluta de la moral y la experiencia histórica, en que trató de resolver la antinomia de una moral absoluta con la experiencia personal. José Rubio Carracido, profesor de la Universidad de Valencia, disertó sobre Hechos, instituciones y reglas morales, trazando un esquema del proceso social de institucionalización de normas de conducta compartidas. A continuación, el profesor Gerard Vilar dictó una conferencia sobre Etica y socialismo en la Escuela de Budapest, en la que expuso las tesis humanistas de dicha escuela. Insistió sobre la urgente necesidad de una ética normativa, para el marxismo, que sustituya la utilitaria tradicional, que sostiene que es moral lo que es útil para el proletariado. Estas consideraciones finales, idealistas y antidialécticas, se aproximan a los postulados del socialismo ético de Karl Vorländer.

De la aguda y penetrante conferencia del profesor Elías Díaz, sobre Ciencia y ética de la teoría marxiana del Estado, debemos retener su descubrimiento de que Marx sostuvo, en sus últimos años, la tesis de la transformación del Estado y no de su extinción. Quizá olvidó que la dictadura del proletariado demuestra que el Estado no es solamente opresor, para Marx, sino también cohesionador y unificador del caótico conglomerado clasista.

El último día del seminario sobre Etica disertaron los profesores Gabriel Bello, sobre Etica y lenguaje en el segundo Wittgenstein; Victoria Camps, sobre Etica y retórica, y Carlos García Gual, sobre Epicuro: hedonismo y liberación. Finalmente, se clausuró la semana, reiterando el carácter de homenaje al profesor Aranguren.