El Gobierno israelí autoriza la compra de tierras en los territorios ocupados
La decisión del Gobierno israelí de levantar la prohibición sobre la compra de tierras en Cisjordania y Gaza a los ciudadanos israelíes provocó una ola de protestas por parte de notables personajes palestinos, incluidos los más moderados.
Los alcaldes de Nablus, El-Bireh, Galgul y Belén condenaron el nuevo decreto gubernamental.«Este decreto es la prueba evidente de que el proyecto de autonomía sirve de cobertura para desposeer progresivamente a los palestinos de sus tierras», dijo Mohamed Mulham, alcalde de Galgul.
«Este decreto no nos sorprende que venga de un Gobierno volcado sobre la causa del Gus Emunin (movimiento anexionista judío), y era previsible», dice el alcalde de Nablus, Basam Shakaa, que expresó su temor de ver a las autoridades israelíes presionar a los propietarios palestinos para forzarles a vender sus tierras a los representantes del Gush Emunin.
Este temor es compartido por un gran número de árabes palestinos en los territorios ocupados.
«Los israelíes violan las leyes internacionales confiscando tierras para instalar colonias judías», comentó el conocido abogado Ramallahazis Shehade, «ahora será más fácil presionar a los propietarios palestinos, haciéndoles comprender que si no venden sus tierras podrían ser confiscadas». Shehade señaló que el nuevo decreto israelí contradice la ley jordana que prohíbe la venta de tierras en Cisjordania a extranjeros, sean israelíes o no. «Las autoridades ocupantes israelíes habían respetado hasta el momento la ley jordana, pero si los israelíes comienzan a cambiar arbitrariamente las leyes en vigor, será el caos desde el punto de vista jurídico», añadió Shehade.
En Israel, el nuevo decreto-ley fue acogido con alegría por el Gush Emunin y otros movimientos nacionalistas, así como por el ministro de Asuntos Exteriores, Moshe Dayan, que ya reclamó el voto para esta ley bajo el Gobierno presidido por Golda Meir.
Según un portavoz del Partido Laborista, el diputado Uzi Baram, «la nueva ley carece de valor práctico y es ilegal, desde el punto de vista jurídico ».
Según Shei (Partido Sionista-Socialista), la ley en cuestión quedará sin efectividad práctica, «pues es una ilusión creer que se pueda comprar el territorio nacional de un pueblo».
Sólo la prensa jordana, entre los medios de comunicación de los países árabes vecinos, ha criticado la nueva ley israelí.
El diario Al Destur escribió que no es necesario creer las protestas americanas y egipcias contra la nueva ley, «que entra en vigor bajo la protección de los aliados de Israel, americanos y egipcios».
