El Gobierno intentará un "entendimiento" con la Oposición
Fuentes gubernamentales muy cualificadas, consultadas por EL PAÍS, consideran necesario propiciar un «clima de entendimiento» entre las principales fuerzas políticas del país, a fin de conseguir mayor eficacia práctica en la búsqueda de soluciones para los más delicados problemas del momento.Entre los temas que podrían ser objeto de estudio figuran las autonomías más urgentes -Cataluña, País Vasco-, la situación económica y aspectos derivados del proceso de consolidación de la democracia.
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Es necesario "algún tipo de pacto" con la Oposición
(Viene de primera página)Según las citadas fuentes -que manifestaron expresar opiniones personales, y no criterios ya adoptados por el Gobierno- el proyecto no estaría enfocado a reproducir el consenso político o los pactos de la Moncloa, pero sí a lograr un cierto entendimiento que permita un trabajo parlamentario más eficaz que el actual, caracterizado por una grave lentitud legislativa y un fuerte desgaste en la discusión de pequeñas cuestiones. Estas últimas sirven a los diferentes grupos, más para definir posiciones cara a la galería que para propiciar respuestas a las demandas de la sociedad española actual, lo cual se demuestra en la escasa profundización que se alcanza en las diversas cuestiones.
«El tiempo de intentar ese clima de entendimiento no es llegado todavía -agregaron las mencionadas fuentes- y aún han de pasar varios meses para que puedan serenarse los ánimos, todavía agitados por las consecuencias del proceso electoral, que, por otra parte, era necesario en el camino de consolidación de la democracia. Pero es probable que sea necesario abordar algún tipo de pacto en un cierto período de tiempo.»
Para el Gobierno, los asuntos prioritarios a atender durante el presente año serían los Estatutos de Autonomía para Cataluña y el País Vasco; la elaboración y promulgación de las primeras leyes de desarrollo de la Constitución, entre ellas la del Tribunal Constitucional, y el intento de contener el crecimiento del paro obrero y del índice de inflación, en el entendimiento de que no existen perspectivas razonables para conseguir una mejora sustancial en el tema del empleo, durante el presente año. También preocupa al Gobierno la necesidad de establecer un marco para las relaciones laborales, aunque en este asunto tiene dudas mucho más grandes que en otros sobre las posibilidades de lograr un entendimiento con las principales fuerzas de la izquierda.
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