Se investigan en Alemania los riesgos de medicamentos contra el infarto y la arterioesclerosis
La Oficina Federal Alemana de Salud Pública, que tiene su sede en Berlin oeste, ha convocado con carácter de urgencia a doce laboratorios que producen en conjunto dieciocho fármacos prescritos hasta ahora para el tratamiento de la arterioesclerosis y para la prevención del infarto de miocardio. Existen indicios según el citado departamento, de que estos preparados pueden producir un efecto contrario. La oficina se ha obligado a emitir un dictamen sobre prohibición o permisión de la venta.
Según la Oficina Federal, se trata de los medicamentos siguientes: Atheropront, Bioscleran, Clofibrat (existen once modalidades distintas de este producto), Regelan, Skleromexe, Sklero-Tablinen, Ticlobran y Xyduril. Todos ellos contienen , Clofibrato. Descontada la distribución en clínicas y hospitales, las farmacias alemanas ingresan al año con la venta de estos fármacos más de cien millones de marcos (unos 4.000 millones de pesetas).La Oficina de Salud ha aceptado informes de tres países Gran Bretaña, Hungría y Checoslovaquia- en los que durante quince años se han estudiado intensivamente los efectos de estos productos en los pacientes que los han recibido. Según el informe británico, se ha observado que los enfermos tratados con Clofibrato, en cualquier modalidad, sufren infarto y cánceres en mayor proporción que el grupo de aquellos que no recibieron este tratamiento.
Al tiempo, los científicos británicos han observado que la incidencia positiva que se atribuía a estos fármacos en los años sesenta es muy pequeña, por lo que puede concluirse que, como poco, no son eficaces en el trata miento de las enfermedades que habrían de combatir. En el mis mo sentido se expresó un estudio norteamericano de 1975. Precisamente, en Estados Unidos se observó que el tratamiento pro longado con Clofibrato hacía ne cesana en muchos casos una ope ración de vesícula.
En el mismo departamento federal se estudia en estos momentos la prohibición de un bálsamo antirreumático, el Marament, que contiene Dicloretano, y otro similar compuesto de Dibrometano, por existir sospechas fundadas de producir tumores malignos que, según el doctor Richard Griesemer, del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, aparecen en tan sólo doce semanas.
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