La calma, comentario de café en Guipúzcoa
La población guipuzcoana ha vivido las últimas veinticuatro horas de forma especialmente tranquila, pese a las alarmantes noticias que reproducían a toda plana los periódicos locales, que narraban ayer los graves sucesos; ocurridos en este territorio vasco en la víspera del referéndum.Sin embargo, la población no fue ajena en ningún momento a la psicosis de violencia que desde hace tiempo padece, y que se había visto acentuada de forma peligrosa en las últimas horas. La tranquilidad extrañaba, y era comentada en bares y establecimientos públicos. La conversación más generalizada durante toda la jornada fue la muerte a tiros, horas antes de la consulta popular, de tres policías, la entrada en directo en los receptores de la televisión de Guipúzcoa de un comunicado de ETA político-militar pidiendo el no a la Constitución, las; ráfagas de metralleta que se escucharon a primeras horas de la madrugada cerca del Gobierno Civil 31 el robo de coches, que previsiblemente se podrían utilizar en nuevos atentados.
La intranquilidad era tan patente que todo el mundo centraba su preocupación y, sobre todo, su curiosidad, en saber si se habían vuelto a producir nuevas acciones armadas, anunciadas por ETA militar en la reivindicación de la última acción directa que costó la vida a los tres funcionarios.
En un ambiente enrarecido, los distritos, colegios, y mesas electorales instaladas en la provincia no tuvieron que desplegar una gran actividad, ya que la afluencia de votantes era escasa. Según fuentes del Partido Socialista de Euskadi (PSOE) facilitadas indirectamente por el gobernador civil de la provincia, a las 4.30 de la tarde habrían emitido su voto el 23 % de los 504.339 ciudadanos guipuzcoanos que pueden legalmente pronunciarse ante el texto constitucional.
La actitud adoptada por los miembros del Partido Nacionalista Vasco que participaban como apoderados en las mesas electorales de Vizcaya y que trataban de impedir la votación a aquellas personas que tuviesen el carnet de identidad caducado no se reflejó en Guipúzcoa, aunque los líderes políticos de esta provincia ajenos al partido mencionado criticaron duramente lo que consideran una actitud antidemocrática de una agrupación que asegura querer romper con el régimen anterior y continúa usando en ocasiones métodos similares al impedir la libre elección de los ciudadanos.
El único incidente, si puede merecer este nombre, que se había producido hasta media tarde fue la sospecha que despertó un paquete colocado cerca de una mesa electoral instalada en el barrio donostiarra de Gros. Avisada la policía, desalojó la sala y mediante un cebo hizo estallar el paquete, comprobando que no contenía ningún explosivo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Política nacional
- Comunicados terroristas
- Referéndum Constitución Española
- Incidentes elecciones
- ETA-pm
- Abstencionismo
- EAJ-PNV
- Gipuzkoa
- Constitución Española
- Resultados electorales
- Atentados mortales
- Votaciones
- Referéndum
- Atentados terroristas
- País Vasco
- Jornada electoral
- Ayuntamientos
- Elecciones
- Partidos políticos
- Parlamento
- ETA
- Comunidades autónomas
- Grupos terroristas
- Administración autonómica
- Administración local