Sadat decide mantener las negociaciones de paz

El presidente egipcio, Anuar el Sadat, anuló su llamada a consultas a los negociadores egipcios que se encuentran en Washington, después de que el presidente norteamericano Carter le convenciera de la necesidad de proseguir las conversaciones de paz. La decisión de Sadat de llamar a El Cairo a sus negociadores para consultas había sido anunciada tras la decisión del primer ministro israelí de ampliar las colonias judías ya existentes en Cisjordania. Carter, que se encuentra en una gira electoral a favor de los candidatos del Partido Demócrata por los estados de Nueva York y Nueva Inglaterra, telefoneó al presidente egipcio. Según afirmaciones de Carter, Sadat le contestó: «Haré lo que mi amigo Jimmy Carter me pida.» «Las negociaciones son lentas, aburridas e inciertas. Necesitamos vuestro estímulo y vuestras oraciones», dijo Carter en una de sus intervenciones públicas.

Un nuevo apoyo, el del presidente Gaafar el Numeiri, de Sudán, ha venido a unirse a los escasos países que favorecen la dinámica de paz iniciada tras las conversaciones de Camp David. Según el diario As Safir de Beirut, Numeiri tomó esta decisión a pesar de la oposición del Parlamento sudanés, con lo cual el diario sostiene que se ha abierto una crisis en Sudán.

Según As Safir, el dirigente de la ultraconservadora Hermandad Musulmana, Hassan el Torabi, dimitió de su cargo en el gabinete en señal de protesta contra la actitud del presidente. Añade el rotativo que el ministro de Asuntos Exteriores, Rashid al Taher Bakr, está considerando también renunciar.

En cuanto a la cumbre árabe de Bagdad, que se inicia el próximo día 2, el príncipe Saud al Faisal, ministro saudita de Asuntos Exteriores, declaró que «no tiene por objetivo aislar a Egipto, sino restablecer la confianza entre todos los países árabes».

En unas declaraciones a la agencia saudita de noticias, el príncipe dijo que aislar al pueblo egipcio y a la nación egipicia de la nación árabe por haber Firmado con Israel los acuerdos de Camp David, no puede ni siquiera pensarse, y que Egipto es parte integral de la nación árabe.

Las reacciones a la concesión del Premio Nobel de la Paz a Sadat y Begin continuaron y según el ministro soviético de Asuntos Exteriores, Andrei Gromyko, dijo que se trata de «una broma». Alemania Federal, por el contrario, acogió favorablemente la concesión de estos dos galardones y el canciller Helmut Schmidt siguió al presidente Carter y envió a su vez telegramas de felicitación a ambos dirigentes.

Según la agencia de noticias libia, el ex miembro del consejo revolucionario de Egipto y suplente interino del difunto Gamal Abdel Nasser, Hussein Chafei, fue detenido y sus propiedades confiscadas por oponerse, junto con otros miembros del comando revolucionario egipcio, a la firma de los acuerdos de Camp David por Egipto.

Ayer por la tarde, el premier israelí, Begin, llamó por teléfono a Sadat para felicitarle y, a pesar de las reticencias agipcias al galardón de Begin, el presidente egipcio le felicitó calurosamente.