Solución Xirinacs

El debate constitucional en el Senado, ha comenzado con la solemnidad del asesinato político, por eso en la sesión inaugural, ayer por la tarde, en el tejado de la casa había un adorno de gárgolas con rifles de mira telescópica y la presidencia puso una entradilla funeral, el lamento por las nuevas víctimas del terrorismo. Volver al estribillo. Esta es una monotonía que tiene ya cierta grandeza ensangrentada, aunque la gente ya se sabe la la liturgia, esa simetría conmemorativa. No había una especial crispación entre los senadores por los recientes atentados. Lo que allí se veía era esa resignación sólida del que contempla la ley de la gravedad. Desde abajo.El trabajo constitucional sigue el último tramo del Pleno del Senado cuando la opinión pública ya se ha desenganchado del asunto. Por cuarta vez va a pasar la garlopa por el madero, y aquí está Sísifo, ajeno al tiroteo, acarreando enmiendas hacia la cúspide como si tal cosa. Otra granizada de palabras va a caer de nuevo sobre el tierno sembrado; quinientas oraciones, algunas necesarias, otras conectadas sólo con la vanidad del propietario, están preparadas. Será cuestión de abrir el paraguas.
Xirinacs ha comenzado a hablar. Ha sobrevolado el texto de la Constitución con 82 enmiendas para él solo, resumidas en unas opiniones de barbería sobre la felicidad política, entre el ungüento pental y la purga de Benito, para arreglar España con el método de Krisnamurti en diez lecciones de moral, contadas en tono de coloquio a una panda de barbudos sentados en la acera. Ayer fue una tarde de profetas, de esos que traen la solución para todo en cuatro folios. A Xirinacs, después de pedir una confederación republicana, le sucedió Fidel Carazo, otro latigador fugado del libro de Daniel, que se sacó del bolsillo una apocalipsis de pilas y puso a la concurrencia el corazón en la garganta por haber rechazado a Dios en la Constitución. Arrepentíos que el fin está cerca. Y vomitó siete cuartillas de ira sagrada sobre la solapa de los tibios.
Y en esto llegó Rosendo Audet Puncernau, de Esquerra Republicana, con un cántico republicano de amor monárquico Xirinacs había dicho que la Monarquía era cuestión de un espermatozoide en busca de un óvulo. Rosendo Audet Puncernau pidió que el espermatozoide fuera sometido a referéndum. Lo cierto es que los senadores tienen la lengua liberada, con todas las emociones políticas, batidas por el pasapuré. Y cuando los republicanos ya se habían desahogado proclamando un 14 de abril, para su escaño, Satrústegui, un caballero del Greco, ha abandonado el entierro del conde de Orgaz, ha puesto el micrófono a la altura de la golilla y ha defendido a su Rey como un Romanones sin fincas rústicas en Guadalajara.
La primera sesión constitucional en el Pleno del Senado ha servido para desbravar a los dulces, fogosos, autonómicos y republicanos visionarios. La enmienda de Cela sobre el pluralismo político la ha cogido un remolino de consenso y se la ha llevado río abajo la corriente. La garlopa de los próceres ha comenzado a funcionar por cuarta vez sobre el articulado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma

Archivado En
Últimas noticias
El grupo de investigación CREA de la UB se disuelve tras las denuncias de acoso
Los presuntos homicidas de Elche asaltaron un concesionario y lesionaron a tres policías tres días antes del crimen
Atacan con pintadas la sede del PP en Finestrat, localidad de la que era alcalde el ‘president’ Pérez Llorca
El Gobierno amplía hasta 2026 el ‘perdón’ a las empresas por las pérdidas del coronavirus
Lo más visto
- El líder groenlandés responde a Trump: “Groenlandia es nuestro país. Nuestras decisiones se toman aquí”
- Comprobar Lotería de Navidad 2025: consulta la lista de números premiados
- El PP de Almeida vota en contra de dedicarle a Robe Iniesta un centro juvenil porque antes quiere hablarlo con su familia
- La revalorización de las pensiones queda en el aire por la negativa de la derecha a apoyar otras medidas sociales
- La Guardia Civil detiene a los dos hombres atrincherados tras matar a dos alemanes en un chalé de Elche




























































