Venezuela, y Panamá, dispuestas a defender a Costa Rica de un nuevo ataque nicaragüense
Venezuela y Panamá se han puesto de acuerdo para ayudar a Costa Rica ante la eventualidad de que se produzcan nuevos incidentes fronterizos con Nicaragua, similares al ocurrido el pasado martes, cuando aviones nicaragüenses violaron el espacio aéreo de Costa Rica y ametrallaron vehículos civiles, causando un no determinado número de muertos. Así se interpreta el hecho de la llegada a San José de aviones de transporte de la fuerza aérea venezolana y helicópteros de la Guardia Nacional panameña.Tanto en Caracas como en la ciudad de Panamá, la explicación oficial dada al envío de los aparatos es que éstos y sus correspondientes tripulaciones realizan misiones de «entrenamiento» y que el aterrizaje en suelo de Costa Rica es una prueba de «amistad y buena voluntad». En fuentes diplomáticas caraqueñas se ¡interpreta la iniciativa de Carlos Andrés Pérez y Omar Torrijos como un gesto destinado a advertir al presidente de Nicaragua, Anastasio Somoza, que Costa Rica, a pesar de no tener fuerzas armadas, no se encontraría indefensa ante una nueva agresión fronteriza.
El canciller venezolano, Simón Alberto Consalvi, viajó inesperadamente en la tarde del jueves a San José e inmediatamente se entrevistó con el presidente Rodrigo Carazo. A mediodía de ayer se esperaba en Caracas el regreso del funcionario venezolano, que habrá coordinado, probablemente, en Costa Rica, la estrategia común en la reunión del consejo permanente de la Organización de Estados Americanos, que debe decidir la convocatoria de una reunión especial de ministros de Asuntos Exteriores para estudiar el caso de Nicaragua.
El frente diplomático formado entre Costa Rica, Panamá y Venezuela ha encontrado inmediatos contragolpes. El ministro de Defensa de Honduras admitió que era posible el envío de tropas regulares para apoyar a la Guardia Nacional de Somoza, si el dictador nicaragüense lo solicitaba expresamente. El Consejo de los Ejército Centroamericanos tiene previsto en sus, estatutos dicha posibilidad, cuya aplicación no es descartable del todo. Existe constancia de que Somoza está tratando por todos los medios de aumentar su potencial bélico para neutralizar los cada día más nutridos ataques de los guerrilleros sandinistas.
Más de quinientos muertos
La actividad bélica, mientras tanto, no ha disminuido. Los combatientes sandinistas, armados ahora con el material recogido a los guardias nacionales muertos o heridos, siguen enfrentándose a las tropas de Somoza en León, Chinandega y Diaramba. La Guardia Nacional, con la ayuda de aviones y helicópteros, ha destruido numerosos edificios de esas ciudades donde los sandinistas se habían hecho fuertes. La Cruz Roja señaló el jueves que las batallas producidas desde el sábado han ocasionado más de quinientos muertos en ambos bandos y un elevadísimo número de heridos.
A partir de ahora será mucho más dificil conocer con exactitud lo que sucede en Nicaragua. Por orden de Somoza, los teletipos de las agencias de noticias internacionales fueron cortados en la tarde del jueves. Tampoco funcionan los télex públicos y los de los hoteles, y los periodistas extranjeros que permanecen en Managua están sometidos a severos controles por parte de la Guardia Nacional, que rodea el hotel Intercontinental, alojamiento de la casi totalidad de los enviados especiales.
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