Incidente diplomático entre Caracas y Washington

El Gobierno venezolano parece haberse quedado satisfecho tras las explicaciones dadas por el Departamento de Estado norteamericano respecto al incidente surgido el fin de semana último, provocado por la publicación de un informe secreto preparado por los asesores de Carter antes de la visita de éste a Venezuela y Brasil.Dicho informe, divulgado por UPI, calificaba al partido Acción Democrática, actualmente en el poder, como «vulnerable» en las próximas elecciones presidenciales de diciembre, a causa de la «mala administración de los ingresos petroleros, la inflación y la corrupción administrativa».

La publicación del informe levantó una oleada de protestas entre los miembros del Gobierno y los dirigentes de Acción Democrática. En un principio, se trató de presentar como «falsos e inexistentes» los documentos a que aludía la información de UPI, y en tal sentido se pronunció, por ejemplo, el candidato de Acción Democrática, Luis Piñerúa. Cuando se confirmó que los documentos, en efecto, existían, se calificó a estos de «intolerables intromisiones en los asuntos internos de Venezuela».

La Embajada de Estados Unidos en Venezuela se apresuró a dar toda clase de explicaciones al Gobierno de Carlos Andrés Pérez y el Departamento de Estado, por medio de su portavoz, ha insistido en que, efectivamente, los informes divulgados existían, pero que su contenido, «de ninguna manera» refleja la posición del Gobierno norteamericano, que es de no intervención en los asuntos internos de otros países. Extraoficialmente se sabe que la noticia transmitida por la agencia internacional provocó un enorme malestar en el Departamento de Estado y en la embajada norteamericana en Caracas. El Gobierno de Carlos Andrés Pérez ha resultado un impagable colaborador de la política del presidente Carter y este incidente.

Quienes se han frotado las manos de satisfacción han sido, naturalmente, los dirigentes del partido de Oposición, el demócratacristiano COPEI, a cuyo candidato presidencial, Luis Herrera, favorecía el informe de los asesores de Carter.