La huelga de los maestros se prolongará hasta el viernes

Los profesores estatales de EGB van a mantener su actitud de huelga hasta el viernes, como consecuencia de lo que el comité de huelga entiende como «ruptura de las negociaciones» por parte del Ministerio. Este afirma que sigue abierto al diálogo y matiza que no puede hablarse de negociaciones en sentido estricto cuando se trata de un profesorado, el estatal, que debe regirse por normas de carácter administrativo o legal, por lo que sus reivindicaciones nunca pueden ser objeto de pacto por parte de la Administración.

Ayer pararon 75.625 maestros en 46 provincias, según el comité de huelga, que no cree que esta cifra se modifique sensiblemente hasta el viernes, fecha de celebración del Consejo de del Ministros, de cuya reunión los maestros esperan de cisiones importantes. En cuanto a la enseñanza privada, tras la declaración formal de conflicto colectivo, los profesionales del sector en Madrid decidieron reincorporarse hoy al trabajo. El Ministerio de Trabajo ha convocado a los representantes sindicales y a la patronal para mañana jueves, a fin de que puedan llegar a un acuerdo en el problema de la revisión del convenio. De no producirse éste en tres días, las autoridades laborales dictarían el laudo que preceptúan las leyes. En una rueda de prensa el comité de huelga del profesorado estatal explicó su versión de los acontecimientos en el curso de las negociaciones desde el lunes. Por la mañana se habían entrevistado con el director general de Personal, señor Vallés, y con el subdirector general de la Función Pública. De los resultados de esta reunión se redactó un acta, firmada por los representantes de la Administración y de los trabajadores, que recogía el compromiso de iniciar ayer, martes, las negociaciones sobre elecciones sindicales, uno de los puntos de la tabla reivindicativa. El mismo lunes por la tarde, volvieron a reunirse los representantes sindicales, esta vez únicamente con el director general de Personal de Educación y Ciencia, señor Vallés.

En esta reunión, que empezó alrededor de las ocho y se prolongó hasta cerca de las doce de la noche, los interlocutores dialogaron sobre los cinco puntos restantes de la tabla reivindicativa, que se refieren a retribuciones, estabilidad de los Interinos y contratados, gestión democrática, jubilación y homologación de título.

Fruto de este diálogo fue la elaboración de un acta de resultados a cuya redacción contribuyó el propio director general, señor Vallés, quien incluso facilitó las fotocopias del texto a los representantes sindicales y que -según éstos- se comprometió a firmar al día siguiente.

No obstante, ayer, martes -siguen informando los portavoces del comité de huelga-, al presentarse en el Ministerio para recabar el acta se les impidió la entrada y posteriormente se les indicó por teléfono que no se les entregaría aquélla y que debían considerar como respuesta la negociación del lunes. Los representantes sindicales decidieron permanecer en la sede del Ministerio para ser finalmente desalojados por la Guardia Civil. En ulterior conversación telefónica con la secretaría del señor Valles, se indicó a los representantes sindicales que tenían órdenes terminantes de su inmediato superior de no dar contestación alguna y que ésta era la postura del director general asumida globalmente por el Ministerio de Educación y Ciencia.

El tiempo transcurrido en todos estos intentos de diálogo impidió a la comisión negociadora -siempre según los portavoces del comité de huelga- asistir a la reunión que tenían prevista con el director general de la Función Pública para tratar el tema sindical.

Finalmente, los portavoces señalaron que si bien la valoración global sobre los resultados de la entrevista de la tarde del lunes no podía ser muy positiva, pues, una vez más, la actitud de la Administración podía calificarse de dilatoria en la mayoría de los aspectos, sin embargo se apreciaba en otros un cierto progreso. Particularmente, se estimaba como positivo el que el Ministerio estableciese un calendario para negociaciones posteriores.

Por su parte, el director general de Personal declaró a Efe que «no se podía firmar un acta sobre los acuerdos tomados hasta que no exista la desconvocatoria de huelga por parte del profesorado». Y, en relación con la «frustrada entrevista» de la mañana de ayer, señaló que ésta no había sido solicitada, por una parte, y que el Ministerio había adoptado una decisión de trabajo, en la que no se podían constatar actas, mientras exista el interín de un paro.

El señor Vallés ha asegurado que se presentará a la aprobación del Consejo de Ministros la petición de aumentar la dedicación exclusiva para el profesorado de EGB.

La comisión negociadora había solicitado en la reunión del lunes a este respecto «que se conceda un crédito suplementario para un incremento salarial de 5.000 pesetas netas mensuales y, a partir de ahí, un aumento proporcional para los no numerarlos en vías de equiparación salarial, a cuenta de la dedicación exclusiva, con implantación real de una hora no lectiva diaria a partir del 1 de abril de 1978, con una jornada laboral de veinticinco horas lectivas y cinco no lectivas a la semana; dicha jornada sería la habitual en el curso académico próximo».

En el acta que no se llegó a firmar se indicaba que el Ministerio elevaría al Consejo de Ministros ambas reivindicaciones.

Existe la impresión de que, aun cuando las propuestas del Ministerio a la comisión negociadora hubiesen sido mucho más nítidas, los maestros hubieran seguido en su actitud de huelga hasta el viernes, fecha de celebración del Consejo de Ministros.

En nuevas declaraciones del señor Vallés, esta vez a Europa Press, el director general precisaría que su negativa a firmar el acta de las conversaciones del lunes se debía, fundamentalmente, al hecho de que el Ministerio no puede establecer pacto alguno con los profesores estatales, que son funcionarios de la Administración pública. Ello, además, porque no tiene sentido firmar un acta en una situación de huelga indefinida, cuyo fin ni siquiera figura en la misma. «Lo primero -añadió- es acabar con la huelga.»

El Ministerio -concluyó el señor Vallés- sigue trabajando en las normas que solucionen los problemas del magisterio.