Madrid y las autonomías

El Gobierno de Adolfo Suárez va a establecer el primer contacto oficial, con el Gobierno vasco en el exilio, con el fin de negociar un régimen provisional de autonomía para las cuatro provincias vascas españolas, siguiendo el ejemplo de lo que se ha previsto para Cataluña. Una entrevista debe tener lugar los próximos días en Bayona entre un enviado especial de Suárez y Jesús María de Leizaola, presidente del Gobierno, apoyado en Francia por las principales formaciones políticas vascas (Partido Nacionalista, Partido Socialista, Acción Nacionalista). Las conversaciones tratarán sobre el restablecimiento del estatuto de autonomía de 1936 abolido por Franco durante la guerra civil, y sobre el regreso de los ministros exiliados (...)Por su parte, el Partido Socialista y el Partido Nacionalista Vasco han terminado de bosquejar un proyecto común de autonomia que presentarán al Gobierno. En efecto, los dos partidos triunfantes en las elecciones del 15 de junio están preocupados por el problema particular que plantea Navarra, la más conservadora de las provincias vascas. En 1936, Navarra había votado contra el estatuto de autonomía y se había qnido al levantamierito franquista, mientras que la mayoría del pueblo vasco defendía la legalidad republicana. Socialistas y, Nacionalistas desean esta vez incluir a Navarra en el cuadro jurídico destinado a devolver al País Vasco sus libertades tradicionales (...)

El jefe del Gobierno está inquieto ante el recrudecimiento de la agitación en Guipúzcoa y en Vizcaya, provocada por manifestaciones en favor de Apalategui. con el temor de desencadenar serios incidentes en Pamplona el domingo próximo (...)

El restablecimiento de la Generalitat, el Gobierno autónomo de Cataluña, abolida por un decreto franquista en 1938, no será tal vez proclamado antes del 11 de septiembre, fiesta nacional de los catalanes. Este día había sido considerado como una fecha límite para el éxito de las negociaciones entre el Gobierno de Madrid y el presidente de la Generalitat en el exilio, honorable señor Tarradellas (...)

Madrid estima ahora que no se puede comprometer con una fecha, aunque sea simbólica, sin dar la impresión de ceder a un chantaje (...)

La principal dificultad radica en las atribuciones que tendría la Generalitat en la fase transitoria que precederá, al menos durante un año, la entrada en vigor de un estatuto definitivo de autonomía. El presidente Tarradellas ejercerá su autoridad sobre las limitaciones de las cuatro provincias catalanas... Una comisión mixta será creada, encargada. de transferir poco a poco a la Generalitat provisoria las competencias ejercidas actualmente por las diputaciones (...)

Una vez instalado en el inmueble de la Generalitat, Tarradellas formará un Gobierno con todos los partidos catalanes que deseen una concentración nacional, desde el Partido Socialista Unificado de Cataluña hasta la Alianza Popular de López Rodó (...)

26 agosto