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Carter acude como protagonista a la capital británica

Aunque nadie espera resultados espectaculares de la cumbre de Londres, sí se da como seguro un total protagonismo, de Jimmy Carter, que expondrá a sus aliados del «mundo trilateral» las líneas maestras de su política económica y exterior.Carter, con tres años y medio de mandato por delante, llegó a Londres en una posición mucho más estable que las de sus seis colegas occidentales, algunos de los cuales tienen serias dificultades para permanecer en el poder en un próximo futuro. Además, el presidente norteamericano aparece como el iniciador de una nueva política de su país, que ha causado inquietud entre sus aliados, cuando no roces evidentes.

Cuatro temas económicos y un conjunto de temas políticos aparecen como prioritarios en la agenda, de trabajo de la reunión; el prirnero y quizás el más crucial de ellos es cómo conciliar las políticas económicas de los «siete» y de qué forma los tres países económicamente más fuertes (USA, Japón y Alemania Federal) pueden ayudar a sus aliados que atraviesan por situaciones difíciles (Italia, Francia y Gran Bretaña), sin que ello se traduzca en un incremento de sus tasas de inflación y desempleo.

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El comercio entre los siete países industriales será otro tema a tratar. Carter puede ofrecer su política antiproteccionista, pero Japón y otros países en plena expansión se quejan de un proteccionismo indirecto.

El problema energético estará también presente en la «cumbre de Downing Street». Como mayores consumidores mundiales de petróleo, con un déficit total cercano a los 40.000 millones de dólares por sus importaciones de crudos, los «siete» discutirán las fórmulas más eficaces para detener el incremento en el consumo de energía.

Las relaciones «Norte-Sur» cerrarán la parte económica de la agenda de trabajo.Previsiblemente, Carter pedirá una mayor ayuda del Norte industrializado al Sur subdesarrollado y mayores facilidades comerciales para los países del Tercer Mundo.

La no proliferación nuclear, los derechos humanos y la seguridad en Europa aparecen como los temas esenciales de fa parte política de las conversaciones de Londres. Tanto la República Federal de Alemania corno Francia y Gran Bretaña están seriamente preocupados por la política nuclear de Carter.

En cuanto a la cruzada de Jimmy Carter sobre los derechos humanos, sus aliados europeos ya demostraron su escaso entusiasmo por la misma, especialmente porque podría provocar la ruptura de la distensión con la URSS, lo que afectaría a la seguridad europea.

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