Carlos Puebla, un juglar de la revolución
Acaba de aparecer en el mercado discográfico español el primer LP de Carlos Puebla, uno de los juglares de la revolución cubana. Y en eso llegó Fidel recoge una pequeña antología de las canciones más conocidas de Puebla en la que se incluye la canción que titula el disco, Rompiendo las relaciones, Todo por la reforma agraria, por allí vinieron y las que sirven de homenaje a dos figuras claves del proceso revolucionario: el Che Guevara y Camilo Cienfuegos.
Quizá una de las dificultades mayores que debe superar la canción política es la de adecuar el contenido a la forma musical. Con frecuencia el compositor de la «canción testimonio» suele basar la eficacia de su obra en el texto, despreciando el armazón formal. Ese tipo de canciones, que afortunadamente parece relegarse a un segundo plano, sólo satisface a los convencidos de antemano, auténticos devoradores de panfletos. Carlos Puebla supera ampliamente esa dificultad y sus letras sobre hechos muy concretos del proceso revolucionario entroncan perfectamente con la música popular y tradicional del folklore cubano: boleros sones guajiras y guarachas, en excelente acompañamiento musical del conjunto Los Tradicionales al servicio de una causa política muy concreta, la revolución cubana.Y probablemente el aspecto más revolucionario de las canciones de Carlos Puebla y Los Tradicionales no radique tanto en sus letras, en las que se difunden con frecuencia consignas del Gobierno cubano, sino en esa demostración de que las canciones políticas no deben despreciar las cualidades formales. El tiempo de los panfletos parece haber terminado. Algo que hay que agradecer a la estupenda serie Gong. de Movieplay.
Babelia
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