El Consejo de Empresarios y la UTT no reconocen el convenio

La huelga de la construcción en Vizcaya aún no ha quedado resuelta. Cuando trabajadores y empresarios se habían puesto de acuerdo, aparece ahora en escena la UTT y el Consejo Provincial de Empresarios -marginados absolutamente a lo largo de todas las negociaciones- y tratan de complicar las cosas y de erigirse en protagonistas tardíos del pacto.

Desde el principio se supo que ninguno de estos dos organismos, representantes del sindicato vertical, aceptarían el arreglo «por su cuenta» de constructores y obreros, que solucionaron por primera vez sus problemas sin contar con ellos.El miércoles, la UTT hacía pública una nota de prensa en la que tras acusar a ambas partes negociadoras de «utilizar a los trabajadores con fines no confesables, lejanos de los verdaderamente laborales», afirmaba que ella y nadie más que ella podía denunciar un convenio vigente y que el pacto realizado «no obligaba a nadie y no existe procedimiento para obligar a las empresas, porque ninguno de los dos firmantes tiene la más mínima capacidad para realizar la denuncia». Con esta frase, la UTT negaba tácitamente el reconocimiento al acuerdo de ambas partes y por tanto la denuncia del actual convenio.

A estos ataques contestarían en carta conjunta ACP (Agrupación de Constructores y Promotores) y SEOPAN -agrupación de las grandes empresas de carácter nacional señalando que, según la legislación vigente, hoy es ilegal todo: la huelga, los piquetes, las asambleas y los pactos, pero todos estos sistemas -dicen- «son producto del período de transición hacia una legalidad democrática».

Con respecto al punto en el que la UTT denuncia que el pacto «no obliga a nadie y no existe procedimiento para obligar a las empresas», los miembros de ACP y SEOPAN -que engloban a la gran mayoría de las constructoras de Vizcaya-, recuerdan al sindicato vertical que tal afirmación es sorprendente si se piensa que «todas las empresas de Vizcaya se encuentran vinculadas por el acuerdo».

Finalmente, ACP y SEOPAN invitaban ayer en un escrito a la UTT a reconsiderar su postura llevando a cabo la pertinente denuncia «en defensa de los trabajadores a quien dice representar».

En la prensa de ayer, y paralelamente con esta nota de los constructores vizcaínos, se hacía pública otra nota del Consejo Provincial de Empresarios apoyando a UTT y redoblando sus ataque s fundamentalmente contra la parte empresarial. Dice el escrito entre otras cosas que «no son válidos los acuerdos suscritos por personas que no acreditan más representación que la que ellas mismas se atribuyen».

El Consejo Provincial de Empresarios declara improcedente y no reconoce pues el acuerdo final entre empresarios y trabajadores, lo que significa la negativa a la denuncia, pero aclara: «cada empresario, no obstante, puede establecer y convenir particularmente con sus trabajadores las mejoras y beneficios que puedan otorgar a su propio personal de empleados».

Los trabajadores y la gente de la calle se pregunta hoy en qué acabará este enfrentamiento entre el sindicato oficial y la entente entre productores y trabajadores, y si puede estropear el laborioso arreglo del conflicto.