Martínez Bordíu pide siete millones de indemnización

Hoy miércoles, día 17, tendrá lugar ante el Tribunal de París, la primera vista del proceso, por difamación, contra el escritor español, José Luis de Vilallonga, intentado por el marqués de Villaverde. Es el segundo proceso con los mismos protagonistas, como consecuencia del artículo de Vilallonga, publicado en la revista mensual parisiense Lui, hace algunos meses, en el que el escritor catalán revelaba más detalles sobre los orígenes de la fortuna de la familia de Franco. El primer proceso tuvo el mismo origen. El marqués de Villaverde, entonces, llevó a Vilallonga a los tribunales. También, por difamación, ganó el pleito, obteniendo lo que pidió su abogado defensor, señor Aujol: «un franco simbólico por daños y perjuicios».En este segundo pleito, Villaverde pide 500.000 francos, es decir, alrededor de siete millones de pesetas. El segundo artículo aparecido en Lui, objeto del proceso actual, fue publicado en diecisiete países europeos y americanos. José Luis de Vilallonga declaró a EL PAÍS que está preparando un tercer artículo, «en el que se explicita más aún la fortuna de la familia de Franco».

El primer proceso aún está en marcha, ya que el abogado de Vilallonga, señor Matarasso, ha recurrido. Interrogado Vilallonga, grande de España, acerca del sentido de sus informaciones sobre la fortuna de los Villaverde y familia, declaró: «Lo único que hago es testimoniar, después llegan los juicios "por difamación". Es costumbre porque, en efecto, algunas pruebas no son fáciles.»

Para apoyar sus informaciones, en este segundo proceso, el abogado de Vilallonga se basará en ciertos pasajes del reciente libro del teniente general Franco Salgado-Araujo, Mis conversaciones privadas con Franco. Sobre el particular, el que fue encargado de relaciones con la prensa de la Junta Democrática comentó: «El abogado de Villaverde, en efecto, basó su primera defensa arguyendo que el marqués no es más que un médico honrado, dedicado plenamente a su profesión, amante de la familia, al margen de la vida mundana, de los negocios, etcétera. El libro aludido puede matizar estas virtudes del marqués.»