Brays Efe: “El humor es contexto, por eso me preocupa que Pablo Hasél esté en la cárcel”
El actor no rechaza temas: lo mismo habla de su amor por las subastas, la violencia machista o el humor como compañero de viaje


A Brays Efe (Las Palmas de Gran Canaria, 34 años) le hubiera encantado trabajar con Lina Morgan y ver en directo a Chiquito de la Calzada. “Son dos personas que me obsesionan por lo únicas que fueron”, dice. Tiene un cuaderno con las 1.001 películas que ver antes de morir y solo le quedan unas 170, pero las lleva aplazando unos 10 años. “Por algo será”, añade entre risas. Efe habla en titulares y no rechaza temas. Lo mismo le da por hablar de su amor por las subastas, la violencia machista y el humor como compañero de viaje.
Pregunta. Cuénteme por qué estamos aquí.
Respuesta. Te he citado en el Teatro Español porque trabajo en una obra de Pablo Messiez que se llama ‘Personas, lugares y cosas’, escrita por Duncan Macmilan. Con una lista de actores encabezada por Irene Escolar, pero como la pongas entera, ya se te ha acabado el espacio para la entrevista.
P. ¿Qué persona, lugar o cosa es usted?
R. Interpreto a Pastor, un trabajador de una clínica de desintoxicación.
P. Me han dicho que es adicto a cosas relacionadas con el cine.
R. Soy mitómano de los objetos. No solo porque le pertenecen a alguien sino porque soy una persona que guarda las cosas. Me gustan las subastas y tengo libros que pertenecieron a David Lynch y hace poco me he comprado una cosa de Joan Rivers. Tengo varias cosas de ella porque es un personaje que siempre me ha hecho reír.
P. ¿Es de los que cree que el humor lo salva todo?
R. Es un excelente compañero. A veces he escrito tuits que han acabado en un lugar donde no estaba destinado, porque el humor es contexto. Por eso me preocupa que Pablo Hasél esté en la cárcel. Vivir en un país en el que en una obra artística no puedas decir exactamente lo que quieras me inquieta. Me gustaría hacer un chiste de María Pombo, que se expone públicamente, sin que venga alguien a decirme que por hacer un chiste estoy linchando a alguien o sumándome a una campaña de odio. Puede no ser tu tipo de chiste y no hacerte gracia, pero quiero poder decirlo.
P. ¿Cómo empezó lo suyo con la interpretación?
R. Hay un punto de azar, aunque como siempre me ha encantado el cine es algo con lo que he estado en contacto desde pequeño. Hice de ayudante de cámara alguna vez, dirigí un corto la carrera (estudió Comunicación Audiovisual), me gustaba escribir… pero nunca me había imaginado actuando. Uno de los primeros trabajos que tuve fue el de payaso en comuniones, cumpleaños, que no está tan lejos de la interpretación, si lo piensas. Lógicamente una experiencia fundamental fue ‘Paquita Salas’.
P. ¿Cómo se lleva con Paquita?
R. Lo que más me frustra es que me pregunten cuándo va a volver, porque es algo que no depende de mí. Siempre me he llevado muy bien con Paquita Salas, y últimamente incluso mejor, porque lo vivo con una cierta distancia.
P. Hace poco, en un episodio del podcast ‘La cena de los idiotés’, habló de su infancia, marcada por la violencia de género.
R. Recuerdo discusiones muy grandes a todos los niveles, de mi padre, pero también de abuelos, tíos…y creo que he sido capaz de entenderlas más tarde, como las situaciones de acoso. Según va pasando el tiempo me siento más cómodo hablando de esto, con más seguridad, porque soy más consciente de lo que viví.
P. Ya puede ponerles nombre a las cosas.
R. A raíz de ese programa me escribió un familiar que me dijo: “Qué curioso, no había leído esa situación así, y ahora puedo ver que era verdad”. Y estamos hablando de que mi padre fue a la cárcel por violencia de género. Si como familiar has visto lo que ha pasado y no puedes ponerle nombre… eso solo significa que en todos estos años nadie ha hablado de eso en la familia.
P. Antes de que vuelva al ensayo, ¿recuerda qué estaba haciendo cuando se anunció la ruptura de Los Javis?
R. ¿Qué día es ese? Porque no me acuerdo, te lo juro. Pero sí me acuerdo de qué hacía cuando empezaron a ser novios, porque me pilló en el bar El Nike de Chueca y me lo contaron los dos.
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