El fenómeno ‘Culpables’, la saga adolescente que quiere derribar los viejos clichés del amor romántico

Culpa mía fue la película de habla no inglesa “más vista de Prime Video” hasta noviembre de 2024, según la plataforma, que no aporta datos concretos sobre el número de visionados. La segunda parte, Culpa tuya, fue número uno a nivel mundial el fin de semana de su lanzamiento el pasado diciembre. Son las dos primeras adaptaciones de la trilogía Culpables (Montena, Penguin Random House), escrita por la autora argentina afincada en España Mercedes Ron (31 años), que acumula más de tres millones de ejemplares vendidos en todo el mundo. Este fenómeno juvenil cuenta la historia de Noah y Nick, de 17 y 22 años. Se conocen cuando la madre de ella y el padre de él se casan y la nueva familia comienza a vivir en una mansión en la costa española. Al principio se odian. Pero en poco tiempo, estos dos jóvenes guapísimos comienzan a gustarse. Esta es una historia clásica de amor prohibido, aunque en mitad de la cuarta ola feminista intenta marcar una diferencia respecto a todas las versiones anteriores de este mito romántico: romper con los estereotipos sobre el amor tóxico, a la vez que se desestigmatiza el género conocido como young adult (para jóvenes). Es decir, acabar de una vez por todas con ese prejuicio que se adhiere como superglue a todo producto cultural que le guste a las chicas.

“Hay una parte de esta película que se repite generación tras generación porque funciona: el amor romántico”, explica Nicole Wallace (22 años), la actriz protagonista. “Con sinceridad, no me fascina este mensaje. La diferencia es que Noah no es esa chica que siempre necesita a un chico para salvarse. Es un ejemplo de protagonista femenina con el que las chicas de hoy pueden sentirse un poco más representadas, incluso admirar. Y así, de paso, yo no me siento fatal”, dice una de las intérpretes jóvenes más importantes del audiovisual español. Desde el estreno de Culpa tuya, el pasado diciembre, ha sumado un millón más de seguidores hasta llegar casi a los ocho en Instagram, y más de dos en TikTok, donde tiene más de 11 millones. Acaba de terminar de rodar una nueva adaptación de La casa de los espíritus, de Isabel Allende.

El personaje de Noah se ríe del amor romántico. “Es una trampa”, le dice a su mejor amiga. Cuando Nick le hace un chupetón, le recuerda que “no es una vaca de la ganadería Leister [apellido del protagonista]”. Se mete en peleas. Conduce con la misma pericia que un chico coches trucados en carreras ilegales. Lee y estudia Filología en la universidad. “Mis personajes femeninos tienen las ideas superclaras y no se dejan avasallar por el chico malo a pesar de que se sientan atraídas por él. Todas hemos pasado por esa fase”, explica Ron, que ha participado en la adaptación audiovisual.

“A la vez, Nick debía ser respetuoso con las mujeres”, cuenta Sofía Cuenca, guionista de las películas. “Teníamos también que evitar la toxicidad en el amor, a veces es a lo que se tiende en los libros de literatura juvenil. Ya estamos saliendo socialmente de este tipo de relaciones y no podíamos llevarlo al entretenimiento”, acompaña Domingo González, director de la trilogía.

Culpables es para la generación Z lo que pudo ser Crepúsculo, A tres metros sobre el cielo y 10 razones para odiarte para los mileniales. Es decir, su representación en los libros y el cine de cómo debía ser su primer amor y las aspiraciones románticas que estos primeros encuentros generan entre las adolescentes. “El impacto es total sobre este tipo de público porque están en un momento de sus vidas en el que creen que el amor todo lo puede, se idealiza mucho”, explica González. Por esta razón, tanto Ron como el equipo de Prime Video aseguran que la directriz siempre ha sido “tratar con respeto a los espectadores, no de manera desdeñosa porque se trate de un público muy joven”.

Las cifras parapetan este fenómeno, pero sus protagonistas, explican, siguen recibiendo algunas críticas —”cada vez menos”, coinciden todas las personas entrevistadas— por dedicarse a un género que entre el público y una parte de la industria editorial y audiovisual siempre se ha visto como “inferior”, en palabras de Ron. “Se sigue considerando así, pero a mí me da igual. Soy una mujer joven que se ha abierto un hueco en la industria editorial y le puedo dar un ejemplo a miles de niñas que quieran dedicarse a escribir este tipo de historias. Hay gente que me dice que se enganchó a la lectura con mis libros. Con todo lo bueno que me está pasando, me dan igual estos comentarios”, explica la autora.

“Cualquier actriz joven o independiente hubiera aceptado un papel como el de Noah”, añade Wallace. “Tengo que comer, pagar un alquiler, trabajar como cualquier persona. Este es un proyecto superdivertido en el que como actriz he crecido y he aprendido muchísimo, y que además me ha abierto muchas puertas”. El director y la guionista se suman: “Estaría bien que todos esos adultos que critican hicieran por lo menos el esfuerzo de verlas”. Algunas madres, aseguran los responsables de las películas, ya están viendo las películas con sus hijas. “Hemos intentado ampliar la edad del público al que llegamos añadiendo tramas de adultos”, dice González. “Aun así, aunque se están dando cambios, todavía no hemos llegado a ese punto de respeto por estas películas”.

La gestión del ‘fandom’

El fandom (el grupo de personas que comparte su pasión por un fenómeno cultural) de Culpables es, además, implacable porque se sabe de memoria cada detalle de estos libros que llevan desde 2017 circulando en internet. Ron comenzó a escribir Culpa mía en Wattpad, la plataforma digital de autopublicación. Una historia que, como ha contado en más de una ocasión, se inspira “en un videoclip de Taylor Swift y un viaje a Los Ángeles”. Cada día publicaba un capítulo y los fans se iban enganchando. Llegó a alcanzar los 71 millones de visualizaciones en este espacio; solo en 2023 acumuló 52,9 millones de lecturas de Culpa mía. Fue entonces cuando la historia de Noah y Nick se convirtió en una trilogía y llamó la atención de la editorial Montena.

Los libros han sido traducidos al inglés por la editorial Sourcebooks y la segunda entrega de la saga entró en la lista de los más vendidos de The New York Times. En junio de 2023 se estrenó en Prime Video la primera adaptación española. La segunda llegó el pasado diciembre. Y el próximo 13 de febrero, la versión británica, My Fault: London, se podrá ver en más de 240 países (incluido España) en esta plataforma.

La expectación, por lo tanto, cuando se anunció la adaptación audiovisual fue máxima. “Ha sido imposible encontrar un Nick moreno de ojos azules”, ríe María Contreras, responsable de películas y series de Amazon MGM Studios para España, que ha ideado las campañas de promoción de las películas “monitorizando la conversación en redes sociales”. En junio de 2023, reunieron a cientos de personas en el Ayuntamiento de Madrid en un evento en el que se anunció el reparto de la película. Nicole Wallace y Gabriel Guevara pasaron el filtro más difícil, la aprobación de los fans que llevaban meses, cuenta Domingo González, publicando sus propios tráileres de los futuros filmes con sus actores favoritos en redes sociales.

Prime Video ideó los #MiércolesCulpables en su cuenta de Instagram para ir dosificando la información sobre las películas. Además, algunos de los actores se embarcaron en una gira mundial en la que presentaron la primera película en grandes eventos y tras esta proyección, permitían ver a los fans algunos minutos de la segunda parte. El pasado diciembre, más de 4.000 personas llenaron el palacio Vistalegre (Madrid) para el estreno de Culpa tuya, al que los protagonistas llegaron en coches de carreras.

Más complicado, admite Ron, ha sido gestionar la adaptación de miles de páginas al metraje audiovisual. “Los libros sirven para completar las tramas que faltan en las películas”, dice la autora, asumiendo que en ocasiones sus seguidores no han sido muy benevolentes con la selección de las secuencias de las películas. “Es un fandom muy crítico y muy leal, obsesivo y territorial”, opina Wallace, “te puede amar durante un momento, alzarte el cielo, hacerte sentir la persona más increíble del mundo y al día siguiente destrozarte. Cada uno tiene unas expectativas y es algo que no puedo controlar. Estoy tranquila con el curro que he hecho”.