AC/DC no fue justo con el diseñador del multimillonario logotipo de la banda
El célebre emblema del grupo fue diseñado para un solo disco, pero la banda lo ha seguido exhibiendo en camisetas, llaveros, mercadotecnia y en conciertos. “He recibido muchos encargos tras es obra, así que ha dado sus frutos, a su manera”, dice su creador
Gerard Huerta es un hombre básico en la historia de AC/DC. Gracias a su trabajo, el legendario grupo de rock ha amasado muchísimo dinero. Sin embargo, ningún miembro de la banda se ha puesto nunca en contacto con él, como confirma el artista a este periódico. Huerta (Los Ángeles, California, 71 años) diseñó cuando contaba 25 años el logotipo del grupo, esas intimidantes cuatro letras partidas por un rayo. Una tipografía angular y prusiana que luego se ha utilizado en docenas de marcas como sinónimo de dureza. Según un estudio de la consultora Rush Order Tees la camiseta de música más popular de todos tiempos es la que muestra el logotipo que Huerta diseñó para el grupo australiano. Por debajo aparecen nombres como Queen, Pink Floyd, The Beatles, Bob Marley o la más actual Ariana Grande.
Un negocio muy lucrativo, sin duda. Pero Huerta asegura que nunca ha cobrado por los miles de productos que se han vendido con su creación estampada: llaveros, bodys de bebés, ropa interior de adultos, tazas, guitarras de juguete, cazadoras, camisetas… Para conocer la historia completa hay que situarse en 1977. “Yo había trabajado para CBS Records durante un tiempo y me había hecho con una reputación con diseños para álbumes de Ted Nugent o Blue Öyster Cult. Bob Defrin, director creativo de Atlantic Records [discográfica de AC/DC], seguía mi trabajo y le gustaba. Así que me contrató para diseñar el logotipo del grupo. Cuando me lo encargó yo ya estaba establecido como autónomo en un piso de Nueva York”, cuenta Huerta desde su estudio de Southport, Connecticut.
Explica la gestación del logotipo: “Las formas de las letras están inspiradas en la Biblia de Gutenberg, que es el primer libro impreso. Luego le di un bisel y lo produje en líneas rectas para lograr un efecto contundente”. Y salieron esas letras con un perímetro dentado y puntiagudo. Los primeros álbumes de AC/DC se lanzaron con un diseño de letras finas y con una barra inclinada en el centro. Fue en Let There Be Rock (1977), cuarto trabajo de la banda de Angus Young, cuando entró el recio logo de Huerta. Para el siguiente disco, Powerage (1978), se cambió por un diseño que era una mezcla del de los primeros álbumes y del de Huerta. “Supongo que no tuvo tanto éxito, así que retomaron el mío para los siguientes discos”, cuenta el artista.
El acuerdo con Huerta era por un solo disco, Let There Be Rock, un trabajo importante en la carrera de la banda, con temas que aún hoy mantienen en su repertorio, como Whole Lotta Rosie, Dog Eat Dog, Hell Ain’t a Bad Place to Be o la que da título al álbum. El grupo, sin embargo, decidió sin consultar con Huerta seguir utilizando el logo. Desde 1979 ya solo se imprimió el del artista californiano: Highway To Hell (1979), Back In Black (1980), For Those About To Rock (We Salute You) (1981)… y hasta el último, Power Up (2020). De los 17 trabajos del grupo, 13 llevan el diseño de Huerta. Nadie del entorno de AC/DC ha desmentido la versión de Huerta.
El artista californiano solo recibió el pago por ese trabajo del disco Let There Be Rock, como él mismo confirma a EL PAÍS. El diseñador entregó el trabajo, se olvidó de él y pasó a otros encargos, entre ellos el diseño de los emblemas de la revista Time y posteriormente de HBO o Calvin Klein Eternity. El contrato tampoco especificaba que el diseño se podía estampar en camisetas y productos de mercadotecnia. Huerta no quiso meter abogados de por medio en su momento, y hoy su visión es conciliadora. “Me pagaron un precio justo en ese momento y he recibido muchos encargos por haber producido esa obra. Así que ha dado sus frutos, a su manera”, cuenta. Le preguntamos cuánto cobró por el diseño y responde: “Nunca hablo de honorarios”.
Así habla sobre este episodio el escritor y periodista británico Jesse Fink en el libro Los Young. Los hermanos que crearon AC/DC: “Por ser un hombre que ha aportado un elemento tan importante para AC/DC como marca, y que por eso podría considerársele como alguien que ayudó notablemente a que los Young hicieran una fortuna con la promoción comercial, podría pensarse que Huerta recibiría regalías, especialmente cuando el logo fue diseñado para un álbum y no como algo que AC/DC usaría a perpetuidad. Pero no”.
El diseñador apunta las claves de un buen distintivo: “Debe ser sencillo y ajustado a lo que representa la empresa o la persona. Y, muy importante, debe quedar bien expuesto. Puedes tener el mejor diseño, pero si nadie lo ve, de poco sirve”. Huerta sigue activo y trabajando para encargos de empresas grandes y pequeñas. “Me gusta pensar que siempre hago el mejor trabajo que puedo para un cliente, ya que creo que eres tan bueno como el último trabajo que has hecho. Pero creo que la exposición del trabajo de AC/DC probablemente le ha dado un lugar más alto en el diseño del que probablemente debería tener”, explica con modestia.
Aunque no escucha las canciones de Angus Young y compañía (”prefiero música de los sesenta y setenta; soy un gran admirador de The Wrecking Crew, un colectivo de músicos que tocó en muchas grabaciones de esta época”), el artista está al tanto de la actualidad de la banda australiana, cuya gira europea pasará por Sevilla los días 29 de mayo y 1 de junio. “Bueno, como todas las bandas de esa época que todavía siguen tocando, realmente se han convertido en una banda de versiones, ya que existen pocos miembros originales. Les pasa igual a Foreigner, The Rolling Stones, The Beach Boys... Incluso The Eagles tienen un solo miembro original”. Hace una parada y remacha: “Pero el resultado es bastante bueno, ya que la calidad de los músicos que han sustituido a los originales son excepcionales”. Un buen tipo Gerard Huerta.
Babelia
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