La Unión de Actores y Actrices clama contra la censura y los abusos en su gran noche de premios

“No vamos a tolerar ni un solo caso de censura. El arte debe ser libre (...) No vamos a tolerar ningún tipo de violencia, agresión o abuso. Desde La Unión de Actores seguiremos asesorando y denunciando, siendo una ayuda a actrices y actores que sufran cualquier abuso. Digamos claro ‘se acabó”. Con este contudente discurso Silvia de Pé, secretaria general de la Unión de Actores y Actrices, dio la bienvenida anoche a los asistentes a la gala de entrega de los premios anuales del principal sindicato del gremio en España, celebrada en el teatro Circo Price de Madrid. “El arte debe ser libre. Nuestro trabajo consiste en dar vida a todas las personas y a todas las realidades”, subrayó De Pé. Con miras al futuro, la secretaria general quiso también dejar claro el próximo objetivo de la organización: “Este año tenemos que conseguir un nuevo convenio para el sector audiovisual que nos permita adecuar la normas con la realidad de la producción. Este cambio no se limita al audiovisual, en teatro estamos consiguiendo importantes cambios”.

La ceremonia, dirigida por el dramaturgo Félix Estaire y presentada por los actores Arantxa Aranguren, Stephanie Gil y Juan Messeguer, fue festiva pero también reivindicativa. La guerra en Gaza estuvo en boca de casi todos los premiados y muchos aprovecharon además para recordar las condiciones de precariedad con que muchas veces tienen que desarrollar su trabajo. Los abusos machistas también protagonizaron algunos discursos, como el de Vicky Luengo, ganadora del premio a la mejor actriz de teatro por Prima Facie, que dedicó el galardón a “las actrices que han sufrido un abuso y no han podido alzar la voz”. También durante la entrega del premio especial Mujeres en Unión-Pilar Bardem a ‘las actrices que cambiaron el lenguaje del cine en España’, un homenaje al trabajo de las actrices que fueron determinantes para el cambio político, social e ideológico del lenguaje del cine en España durante los últimos años del franquismo y la Transición.

Entre los títulos más premiados de la noche se encuentra Chinas, en la categoría de cine, que logró el premio a mejor actriz de reparto (Yeju Ji) y los dos de la categoría de revelación (Julio Hu Chen y Xinyi Ye). En televisión, la serie La Mesías se hizo con dos galardones, el de mejor actriz protagonista (Lola Dueñas) y el mejor actriz de reparto (Gracia Olayo); Poquita fe se llevó dos en las categorías de mejor actriz secundaria (Pilar Gómez) y mejor actor de reparto para (Jorge Basanta). La vida es sueño, en teatro, se llevó otros dos: Alfredo Noval como mejor actor protagonista y Ernesto Arias, como mejor actor secundario.

El premio a toda una vida ha sido para Gemma Cuervo, que reconoce la larga trayectoria sobre las tablas de la actriz, su dedicación, entrega y pasión durante una vida entregada a la interpretación. “Gracias compañeros queridos, que siempre seamos eso: compañeros unidos (...) Os adoro porque entre todos hacemos la cultura, entre todos salvamos el teatro. Soy tan feliz siendo actriz, en una tabla o en un escenario”, dijo.

Otro homenaje fue para el sindicato estadounidense SAG-AFTRA, organizador de la huelga de actores que paró Hollywood durante 118 días el año pasado, a quien la Unión de Actores y Actrices concedió otro premio especial por su labor en la defensa de los derechos de la comunidad artística. Duncan Crabtree-Ireland, director ejecutivo nacional y jefe negociador de SAG-AFTRA, dijo cuando subió a recoger el galardón: “El año pasado fue testigo de una de las batallas más arduas que nuestra industria ha enfrentado jamás (…) y fuimos capaces de unirnos y decir ‘basta’. Nuestras acciones de huelga reescribieron las reglas sobre cómo la tecnología y la inteligencia artificial pueden ser alcanzadas”.