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El toreo como una obra de arte

El escritor Félix de Azúa, un aficionado intelectual, pregonó la sevillana feria taurina de abril

Antonio Lorca
Félix de Azúa, el día de su ingreso en la Academia, junto a Vargas Llosa.
Félix de Azúa, el día de su ingreso en la Academia, junto a Vargas Llosa.RAE

El toreo como una obra de arte; una reflexión sobre la tauromaquia como arte trascendental, que va más allá de su pura presencia física en una arena. Una obra de arte viviente.

Este ha sido el hilo argumental del pregón taurino de la Feria de Abril de 2022, organizado por la Real Maestranza de Caballería, y que ha pronunciado esta mañana en un teatro sevillano el escritor Félix de Azúa. Así ha comenzado la celebración taurina del tradicional Domingo de Resurrección en la capital hispalense, que esta tarde se trasladará a la plaza de La Maestranza, donde está anunciada una terna de lujo que ha colgado el cartel de ‘no hay billetes’ en las taquillas. Morante de la Puebla, que cumplirá su compromiso infiltrado tras la voltereta que sufrió ayer en la plaza de La Línea y que le produjo una luxación clavicular, Juan Ortega y Pablo Aguado harán el paseíllo dos años después de que el coso quedara clausurado en fecha tan señalada a causa de la pandemia.

El pregonero no pudo ser presentado por Mario Vargas Llosa, -que le antecedió en esta responsabilidad en la temporada del año 2000-, como estaba previsto, quien excusó su ausencia a causa de la pandemia, y fue el delegado de Fiestas Mayores de la ciudad, Juan Carlos Cabrera, quien trazó algunas pinceladas sobre la biografía del intelectual catalán, miembro de la Real Academia.

Morante hará esta tarde el paseíllo tras la voltereta que sufrió ayer en La Línea de la Concepción

Por su parte, el pregonero ya había adelantado que no es un aficionado al uso, y que su interés por la fiesta de los toros se define más como un hecho cultural y trascendental del ser humano que como la emoción instantánea que brota del enfrentamiento entre un toro y un torero. Así, defendió la tauromaquia no como un aficionado moderno, sino como un intelectual comprometido con lo que considera una obra de arte viviente

El texto de Azúa no fue un tradicional canto a las excelencias de las fiestas de toros en Sevilla, sino un análisis mitológico y cultural del toro, los aficionados y el misterio que encierra la tauromaquia. Félix de Azúa (Barcelona, 1944) fue elegido por la Real Maestranza en diciembre de 2019 para subir al escenario del teatro Lope de Vega en la primavera de 2020, pero la epidemia obligó a la suspensión del acto y la propia Feria de Abril, y hasta este Domingo de Resurrección de 2022 no ha sido posible que expusiera ante un nutrido grupo de aficionados sevillanos su vinculación con la tauromaquia y su personal interpretación del espectáculo.

Azúa se une a una larga lista de intelectuales pregoneros, entre los que destacan, además de su fallido presentador, los escritores Carlos Fuentes, Fernando Savater, Arturo Pérez Reverte e Ildefonso Falcones; el actor y dramaturgo Albert Boadella; los filósofos Francis Wolf y Víctor Gómez Pin; los políticos Manuel Clavero Arévalo, Enrique Múgica y Esperanza Aguirre; la catedrática Araceli Guillaume-Alonso, y el arquitecto Rafael Moneo, entre otros.

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Sobre la firma

Antonio Lorca
Es colaborador taurino de EL PAÍS desde 1992. Nació en Sevilla y estudió Ciencias de la Información en Madrid. Ha trabajado en 'El Correo de Andalucía' y en la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA). Ha publicado dos libros sobre los diestros Pepe Luis Vargas y Pepe Luis Vázquez.

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