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Rosamund Pike: “Las personas tienen criterios diferentes para juzgar a un hombre o a una mujer inteligente”

La actriz inglesa interpreta a Marie Curie en la nueva película de Marjane Satrapi, que llega a los cines de España este 4 de diciembre

En foto, Rosamund Pike en 'Madame Curie'. En vídeo, el tráiler de la películar.

Rosamund Pike se bautizó en el cine interpretando a Miranda Frost, la Bond Girl de Muere Otro Día (2002). Era una estudiante de 23 años recién graduada en Oxford que llegó a ser definida por ese papel como “la rubia de hielo” o “la rosa inglesa”. “Me sentí cosificada. Piensa en una manera más interesante para describirme, ¿no?”, dijo en junio en una entrevista en The Independent. Después de la nominación a los Oscar por Perdida (2014), su carrera ha despegado aún más y su actividad como actriz se ha centrado sobre todo en los papeles que ponen en valor la mente por encima de la apariencia física. Por eso, en los últimos años la intérprete londinense (41 años) ha sido Marie Colvin, reportera de guerra (A Private War, 2018); Ruth William, que luchó por el reconocimiento de su unión interracial en los años cuarenta (Un reino unido, 2017); y, por último, Marie Curie.

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Madame Curie, versión cinematográfica de un cómic de Lauren Redniss, llega a los cines de España este viernes 4 de diciembre, dirigida por Marjane Satrapi, la directora de la película y autora del libro Persépolis (que relata su vida durante el cambio de régimen en Irán y su huída a Francia). Como ella, también la científica Maria Sklodowska escapó de Polonia para instalarse en París, donde su nombre cambió a Marie y su apellido se combinó con el de su marido, Pierre Curie.

“Sabía que no iba a hacer un filme convencional. No iba a retratar Marie Curie como un ángel, una científica brillante y una madre fantástica, porque no era así. Era una criatura complicada”, afirma Pike en una llamada por Zoom desde Praga, donde ha pasado el confinamiento y ha rodado una serie. La actriz aceptó interpretar este papel tan ilustre y descubrió detalles que no conocía sobre esa figura: que Curie había ganado dos premios Nobel, uno de ellos en la categoría de Física con su marido y Antoine Henri Becquerel (descubrió la radioactividad) en 1903, y otro en Química en 1911. Su hija Irène consiguió el mismo reconocimiento en 1935.


Rosamund Pike en una imagen de la película 'Perdida'.
Rosamund Pike en una imagen de la película 'Perdida'.

La científica se ha vuelto un icono en el mundo científico y por los derechos de la mujer. Tras la muerte de Pierre Curie en 1906, ella ocupó su puesto y se convirtió en la primera profesora de la historia de la Sorbona. Descubrió dos nuevos elementos, el radio y el polonio. Pero también fue acusada y juzgada por una opinión pública despiadada por la relación que mantuvo con Paul Langevin. Aunque la Academia de Estocolmo la invitó a que no acudiera a la entrega de su segundo Nobel, ella se negó y fue.

“Curie fue un genio y no pienso que habría obtenido lo que ha obtenido siendo amable con cualquiera. No tenía el tiempo”.

Cuando una mujer es un genio es criticada porque no es agradable, es avara, es difícil. Las personas tienen criterios diferentes para juzgar a un hombre o a una mujer inteligente. Curie fue un genio y no pienso que habría obtenido lo que ha obtenido siendo amable con cualquiera. No tenía ese tiempo”, zanja la actriz. Pike subraya que “la cultura nerd”, de la que forma parte también la ciencia, ha sido y sigue siendo controlada por el hombre.

Lo mismo se puede pensar de la industria audiovisual, que ha elevado la belleza a uno de los factores determinantes para obtener un rol femenino. Para Madame Curie, Pike ha acudido a clases de química, centrándose en lo que más le gusta: entrenar la mente. “Cada cultura necesita la belleza. Todos la necesitamos. Pero es que el mismo concepto de belleza ha sido comprometido. En lugar de entenderla como un amplio espectro de posibilidades, los criterios se han restringido cada día más. Es una cosa muy valiosa, pero la apreciamos de una manera muy antigua. Si se restringe solo se aceptará cierto tipo de mujer con un tipo de físico. Lo que es interesante de Marie Curie es que pude enfocarme en mi mente y no en mi cara o mi cuerpo”, dice.

“No creo que la belleza corresponda siempre con el personaje más interesante”.

Cuando emprendió su carrera como actriz, a Pike le pareció extraño que alguien le pidiera que pusiera más atención sobre su aspecto, ya que siempre había considerado que lo más importante en una persona son sus capacidades intelectuales y su manera de ser. De hecho, “si yo echo un vistazo a mi carrera creo que los papeles en los que aparezco mejor puede que no sean mis mejores actuaciones. No creo que la belleza corresponda siempre con el personaje más interesante”, sostiene.

De ahí la atracción por mujeres que son “agentes de su propia historia, de su cambio” como la reportera Marie Colvin, muerta en 2012 durante el bombardeo de Homs (Siria) perpetrado por las fuerzas de Assad contra los civiles o Ruth Williams, que luchó con su marido, Seretse Khama, luego presidente de Botswana, para obtener el reconocimiento de su matrimonio interracial. Y si tuviera que elegir entre un icono que todavía no ha interpretado, Pike lo tiene claro: Simone De Beauvoir.

La historia de la radioactividad

No se trata solo de un filme sobre una gran científica, sino también del relato de una gran historia de amor y, sobre todo, de la radioactividad. Madame Curie se cuestiona sobre lo que Pike define “un gran poder para lo bueno y el potencial para un terrible mal”, que causa cada gran hallazgo. Así le ocurrió a Alfred Nobel con la dinamita y aún más a Curie con la radioactividad. A menudo la película se mueve entre saltos temporales que por un lado muestran los efectos positivos del nuevo elemento, como su utilización en la curación del cáncer, y por otro los negativos, como con la bomba atómica. “No puedes ser responsable de lo que la humanidad hace con tu descubrimiento”, opina la inglesa.

En el Reino Unido, la obra de Satrapi se lanzó en junio con otro título: Radioactive (Radioactivo), que explica la relevancia del trabajo científico. En el momento histórico que el mundo vive, sacudido por la pandemia global, esa reflexión alcanza otro nivel de profundidad: “Pienso que la gente reflexionará mucho con este filme porque estamos muy interesados en la ciencia. Los científicos son de repente héroes una vez más”.

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